La Policía Federal de Brasil lanzó ayer lunes la operación Contracara (Operação Contraface) para desmantelar una organización criminal establecida en Cascavel y Toledo, en el estado de Paraná (en la frontera con Paraguay), dedicada al tráfico internacional de estupefacientes y armas de fuego.
“Se constató que el grupo criminal, liderado por empresarios de Cascavel y Toledo/PR, importaba marihuana y pistolas del Paraguay, las almacenó temporalmente en diversos depósitos repartidos por la región occidental de Paraná, adquirió diversos vehículos, especialmente camiones, para transportarlos”, refiere el comunicado de prensa de la policía brasileña.
EMPRESAS FICTICIAS
Agrega que esta organización “creó empresas ficticias para aparecer como propietarias de dichos vehículos; creó compartimentos ocultos en vehículos de motor; simuló la venta de vehículos a conductores contratados para conducirlos; transportó armas y drogas a varios estados de Brasil y abrió cuentas bancarias en poder de personas naturales y jurídicas interpuestas para lavar el dinero obtenido de sus prácticas criminales”.
Las investigaciones de la operación Contracara comenzaron en mayo de 2023, desde entonces se habían incautado de varios cargamentos de estupefacientes y armas de fuego pertenecientes al grupo, por un total aproximado de 26 toneladas de marihuana y 8 pistolas.
Ayer lunes se libraron 9 órdenes de detención, 13 de allanamientos y 22 de incautaciones en las ciudades de Cascavel, Toledo y Medianeira (Paraná), Erechim (Río Grande del Sur) y Florianópolis (Santa Catarina