Un total de 46.460 consultas por enfermedad tipo influenza (ETI) reportó el Ministerio de Salud, según el informe de Vigilancia Universal, una semana después que informará el aumento de 24.202 a 37.496 atenciones médicas. La franja en edad pediátrica y la de 60 años y más son las más afectadas por las infecciones respiratorias, refiere la nota publicada el viernes pasado.
En la última semana se registraron 350 hospitalizados por infecciones respiratorias agudas graves (IRAG), 26 más que la semana anterior. El 47 % de las internaciones corresponde a la edad pediátrica; siendo el 43 % pacientes con menos de 2 años y 53 % corresponde a la edad adulta, siendo el 64 % mayores de 60 años.
Los virus respiratorios identificados en la última semana, en pacientes hospitalizados por infecciones respiratorias agudas son: influenza A, rhinovirus y SARS-CoV2. Igualmente, se detectó, pero en menor proporción, cuadros por virus sincitial respiratorio, influenza B y adenovirus.
Ante la presencia de fiebre y síntomas respiratorios (tos, dolor de garganta u otro) se insta al uso de tapaboca, acudir a la consulta médica oportuna, a fin de contar con un diagnóstico, determinar el virus y recibir el tratamiento correspondiente, así también a cumplir con el reposo indicado para impedir la propagación del virus
La vacunación anual contra los virus respiratorios circulantes está disponible en todos los vacunatorios del país. Estas vacunas, contra la influenza y el covid-19, están indicadas a la población a partir de los 6 meses de edad en adelante. Es igualmente esencial mantener al día el esquema regular de vacunación de los niños, sobre todo en los menores de 5 años.
MEDIDAS PARA PREVENIR CONTAGIO
Entre las recomendaciones se encuentran el uso de tapabocas si presenta síntomas respiratorios y no debe ser retirado al momento de toser o estornudar. También es clave su utilización al acudir a los establecimientos de salud. Asimismo, cubrirse la boca y la nariz con un pañuelo al toser o estornudar. Desechar el pañuelo y seguidamente higienizarse las manos. En caso de no contar con pañuelo, cubrirse con la flexura interna del codo, nunca con la mano, de manera de disminuir la dispersión de gotitas y aerosoles, así como la contaminación de superficies.