Desde la empresa Ste­ven Automotores se lideraba un esquema de estafas a compradores de buena fe, quienes adquirían los vehículos, que luego les eran requisados “por falta de pago”. En la noche del viernes cayó el padre del propietario. La Policía Nacional detuvo a Carlos Alfredo Bareiro Bení­tez, padre de Steven, por los hechos de estafa cometidos con la venta de vehículos. “Sería el segundo al mando, una de las personas que fir­maba documentos mien­tras no estaba Steven”, relató el comisario interviniente. Bareiro Benítez cuenta con orden de captura por supuesto hecho punible de producción de documentos no auténticos y desacato a una orden judicial.

El procedimiento estuvo a cargo del Dpto. de Investiga­ción de Hechos Punibles de Asunción, donde quedó dete­nido el requerido. Por su parte, Denis Steven Bareiro, el propie­tario de la playa de Steven Auto­motores, hasta el momento continúa prófugo de la Justi­cia. Dentro de este esquema también está involucrado el juez de paz de Nueva Asunción, Jorge Franco Garelik, quien fue desaforado por el Jurado de Enjuiciamiento de Magistra­dos (JEM), para que la Fiscalía avance en la investigación. El juez fue imputado por el hecho punible contra el ejercicio de las funciones públicas, prevaricato y asociación criminal.

RESOLUCIONES AMAÑADAS

Según la investigación, junto con una funcionaria del Juz­gado de Paz de Chaco’i, el juez Garelik emitió resoluciones como orden de secuestro, vio­lando los derechos de la otra parte para favorecer a la playa en cuestión.

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Las resoluciones eran emiti­das inmediatamente después del escrito de la demanda sin cumplir las formalidades que requiere un juicio ordinario en el ámbito civil, según se corro­boró con 68 expedientes judi­ciales incautados durante un allanamiento.

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