La Policía Nacional y el Ministerio Público allanaron ayer miércoles dos viviendas del juez de Paz de Nueva Asunción (Presidente Hayes), Jorge Franco Garelik, imputado en el caso de megaestafa de una playa de venta de autos. Los procedimientos se realizaron en su residencia en el barrio Hipódromo de Asunción, donde el magistrado recibió a los intervinientes, y en una propiedad en Villeta conocida como el “castillo”, donde se requisaron documentos relacionados a la causa.
El comisario César Diarte, jefe de Investigaciones de Asunción, afirmó que suman más de 300 víctimas de estafa por parte de la concesionaria Stiven Automotores, cuyo propietario se encuentra prófugo. De este esquema también habría participado el juez que se expedía con llamativa celeridad en los casos de recuperación de rodados por parte de la citada firma que alegaba retrasos en los pagos de las cuotas por parte de sus clientes. Franco Garelik era quien firmaba las órdenes de secuestro de los automóviles, que posteriormente eran vendidos a otras personas.
“Se tenía toda una estructura montada ya y le era fácil porque conseguían las órdenes de secuestro en tiempo récord, tenían el oficial de justicia que iba a ejecutar, gente que les acompañaba para traer el vehículo”, detalló el comisario Diarte en entrevista con el canal GEN y Universo 970 AM/Nación Media, durante el programa “Dos en la ciudad”.
Según las víctimas, todos los vehículos contaban con GPS e inclusive un sistema de interrupción automática que eran manejados desde la empresa, por lo que podría quedar inmovilizado en plena vía pública. Con esta estrategia podían localizar con exactitud los vehículos en cualquier parte del país. Además, contaban con una copia de la llave de los rodados para facilitar el rescate de su ocasional propietario.
“Stiven Bareiro sigue prófugo, pero ya cuenta con orden de detención. Son varias personas que están siendo investigadas, esto continúa. Estamos en una etapa incipiente todavía, pero cada vez se van agregando más personajes en este grupo. Y son más de 300 personas ya las afectadas”, dijo Diarte.