Las altas temperatu­ras que se registran en todo el territorio nacional desde hace ya una semana indudablemente empiezan a generar efectos adversos en la salud de la ciu­dadanía, en especial de aque­llas personas que necesaria­mente deben estar expuestas en horas pico al sol acudiendo de emergencia a los centros asistenciales.

En particular en la ciudad de Concepción, en solo 48 horas ya registraron el ingreso de más de 150 pacientes que presentaban cuadros febri­les, además de una impor­tante cantidad de personas que padecen enfermedades crónicas como diabetes y problemas cardiacos, por lo que sufrieron descompen­saciones.

“Hemos tenido el ingreso de cientos de pacientes con sín­toma febril, descompensa­dos, si bien no se descartan que sean cuadros de algún tipo de arbovirosis, también tenemos en cuenta los casos de pacientes que ingresan por golpe de calor, inclusive hemos tenido un caso de accidente cerebrovascu­lar el cual creemos fue pro­ducto de las altas tempera­turas registradas”, indicó el doctor Mario Pérez, direc­tor de la Primera Región Sanitaria, en conversación con el canal GEN.

El mismo destacó que si bien se mantienen monitoreados a los pacientes sospechosos de que sean casos de dengue, también se advierte a la ciu­dadanía a tener en cuenta las medidas para evitar un golpe de calor, ya que en muchos casos ingresan per­sonas de tercera edad que ya cuentan con patología de base, hecho que los pone en mayor riesgo.

Teniendo en cuenta que este fenómeno de altas tempera­turas persistirá aún por al menos una semana, el Minis­terio de Salud emitió una lista de puntos a tener en cuenta para evitar sufrir golpes de calor o descompensaciones y entre ellas se destacan: hidra­tarse constantemente con agua potable a lo largo de la jornada, llevar una alimenta­ción liviana y fresca, con pre­sencia de frutas y verduras en el menú, evitar la exposición al sol en horas pico, sobre todo entre las 10:00 y las 17:00. Si se estará expuesto al sol, pro­teger la cabeza con sombre­ros, quepis o sombrillas.

Utilizar el aire acondicionado entre 22 y 24 °C, para evitar el cambio brusco entre el aire frío de la habitación y el calor extremo del exterior, y dismi­nuir las actividades físicas en exteriores.

Desde el área de Psiquiatría de Clínicas señalan que las elevadas temperaturas como las que se registran esta semana son capa­ces de alterar el equilibrio de neurotransmisores de serotonina y dopamina, y, por ende, aumentar la depresión, irritabilidad y otras condiciones.

En tiempos extremadamente calurosos, las consultas y hospitali­zaciones por cuadros de depresión, ansiedad, psicosis y demen­cias se incrementan, según informaron desde el Departamento de Salud Mental y desde la Cátedra de Psiquiatría del Hospital de Clínicas.

Además, las personas que padecen trastornos mentales pueden sufrir síntomas exacerbados en estos periodos, algo que puede agravarse si se incluye el consumo de alcohol.