El asesinato de Joaquín Morel Ortigoza (28), que inicialmente se caratulaba como posible caso de sicariato, verificó un giro en las últimas horas. Ahora la pesquisa habla de un presunto trasfondo pasional, informa hoy.com/Nación Media.
El viraje se da tras la declaración de un testigo que, accidentalmente, estaba en la zona en la que se perpetró el crimen, y que vio a un hombre que interceptó a la víctima y le infligió disparos de arma de fuego.
El episodio se registró en un terreno baldío ubicado al costado de la ruta del barrio Santo Domingo, salida Norte de la ciudad de Yuty, Caazapá. “El que disparó y mató a Joaquín fue Hernán Acuña González, estaba vestido con una campera con capucha y pantalón de color oscuro. El mismo iba en moto y le interceptó a Joaquín, ahí le disparó y mató”, señala el informe policial basado en el relato del testigo.
El jefe de la Comisaría 2.ª, Alberto Duarte, expresó que con el testimonio recogido se inició la búsqueda del presunto autor cuya detención, dijo, será cuestión de horas, ya que se activaron las alertas para ello.
Según datos recogidos por los que abrieron la investigación sobre el crimen, la víctima había iniciado una relación sentimental con la expareja del victimario, y que este amenazaba a Joaquín para que desista en seguir el relacionamiento con la que fue su mujer. En vista que ese pedido era rechazada por la nueva pareja, al parecer, fue lo que habría desatado la acción de eliminarlo físicamente.