Desde la Asociación de Pacientes con Esclerosis Múltiple y Enfermedades Desmielinizantes (Apemed) denuncian que el Instituto de Previsión Social (IPS) busca utilizar medicamentos biosimilares para el tratamiento de esta enfermedad, sin haber consultado ni con los médicos ni con los pacientes respecto a este cambio. Esto podría afectar la salud de quienes reciben tratamiento desde hace años.
“Sostenemos que para los cambios o sustituciones no debe primar el interés económico de las instituciones de salud, sino el bienestar del paciente, En nuestro caso, con diagnóstico de esclerosis múltiple, en tratamiento desde hace muchos años con el medicamento biológico se encontraron con la sorpresa del cambio al momento de querer retirar el medicamento. En ventanilla de la farmacia externa les informan que el único medicamento disponible es el biosimilar”, comentó Lourdes Morales, miembro de la Apemed, en conversación con La Nación/Nación Media.
La preocupación principal de los pacientes ante este escenario es que se termine por instalar el uso del medicamento biosimilar y ya no tengan acceso al que actualmente utilizan, arriesgándose a que se puedan dar fallas en el tratamiento, en especial de aquellos pacientes que llevan años utilizando la misma medicación y que cuentan con un diagnóstico crónico.
“Presentamos notas a la Gerencia de Salud del IPS solicitando audiencia, entrevistarnos, pero no recibimos ningún tipo de respuesta, también nos acercamos ante la jefatura del servicio de neurología, donde se escuchó nuestro reclamo, y nos informaron que se respetaría el seguimiento del tratamiento con el medicamento biológico a los pacientes que están en tratamiento con él.