Las constantes lluvias que se registran debido al fenómeno climático El Niño resultan en una verdadera bomba de tiempo con respecto a la proliferación de larvas de mosquitos. La conciencia ciudadana es fundamental para evitar que la epidemia de dengue, que actualmente está comenzando, se vuelva en una situación incontrolable. El mosquito aedes aegypti es el transmisor de enfermedades como la fiebre amarilla, el virus mayaro, el dengue, zika y chikungunya, enfermedad de la que muchos aún no se recuperan.
En las últimas semanas se registraron casi 400 casos de dengue, lo cual pone en alerta a las autoridades sanitarias. Todas las regiones del país notifican casos. Los más afectados entre estos casos son niños cuyas edades oscilan entre 5 y 14 años y las autoridades advierten de la posibilidad de una gran explosión de casos.
El Ministerio de Salud Pública insta a la ciudadanía a tomarse todos los días 10 minutos de su tiempo a diario para buscar en su patio posibles criaderos de mosquito, especialmente luego de cada lluvia. Esto marcará la diferencia, ya que se evitará la proliferación de los criaderos de mosquitos.
Desde el Servicio Nacional de Erradicación del Paludismo (Senepa) recuerdan que las fumigaciones que se realizan en las zonas endémicas solo eliminan los mosquitos adultos, no así las larvas y que cuando tienen las condiciones adecuadas, agua y sol, los huevos se convierten en larvas y estas pasan a ser crisálida y luego mosquitos adultos. Un huevo demora entre 7 y 10 días en convertirse en un mosquito adulto.
CICLO DEL MOSQUITO
Los mosquitos hembra depositan sus huevos en cualquier receptáculo que contenga agua. Los huevos se adhieren a las paredes de los recipientes como si tuvieran pegamento. Pueden sobrevivir sin estar dentro del agua por un período de hasta 8 meses. Los huevos de mosquito pueden incluso sobrevivir un invierno.