En un trabajo conjunto con las autoridades de control y vigilancia, apostadas en el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi, y agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), se logró detectar el ingreso de dos paquetes que contenían una importante cantidad de droga tipo éxtasis, proveniente de Suiza.
La encomienda fue declarada como dos bolsas de alimentos para peces, pero llamó la atención del personal del Área de Perfilamiento de Encomiendas Aéreas, motivo por el cual se solicitó retener la carga para su inspección a la fiscal Elva Cáceres.
Una vez que los paquetes fueron abiertos en las oficinas de Atención Permanente del Palacio de Justicia y, en presencia de la jueza Lici Teresita Sánchez, se confirmó que entre el alimento para peces fueron enviadas 13.000 pastillas de éxtasis, las cuales podrían haber generado a las organizaciones criminales en promedio una ganancia de 130.000 dólares.Con la incautación de esta encomienda se puede hablar de una pérdida millonaria para los traficantes de droga, ya que, según las informaciones obtenidas por los agentes antidrogas, normalmente este tipo de cargamentos tiene como destino la frontera entre Paraguay, Brasil y Argentina, donde se procede a la redistribución de la carga.
Los controles respecto al ingreso de droga por terminales aeroportuarias se han duplicado, en un esfuerzo por frenar la utilización de esta ruta, especialmente desde otros continentes, ya que es una de las estrategias más usadas para ocultar la droga entre encomiendas para hacerlas pasar vía aérea, en un esfuerzo de que el envío, y posterior distribución en los países receptores, sea lo más rápido posible.