En pleno circuito comercial de la ciu­dad de Encarnación, dos hombres con cascos pues­tos ingresaron a un comercio y con arma de fuego en mano intimaron a los encargados del lugar y a una clienta que se encontraba realizando com­pras. Todo lo sucedido quedó registrado en imágenes de circuito cerrado. Al ingresar al lugar, uno de los sujetos se dirigió directamente hacia la caja registradora en donde a punta de arma de fuego obligó a la cajera a que le entregara todo el dinero que, según la denuncia, ascendería a G. 3.800.000, así también se alzó con los teléfonos celu­lares de la empresa.

Por su parte, el otro sujeto redujo a la compradora que se encon­traba en el sitio y la despojó de sus objetos personales, entre ellos, dos celulares y la suma de G. 500.000. Una vez que lograron su come­tido, los malvivientes se die­ron a la fuga a bordo de una motocicleta de color negro, el momento de la huida también quedó registrado en las cáma­ras de circuito cerrado. “Hace quince días ya se registró un hecho similar también en la zona, y estamos recabando datos de los presuntos auto­res, no se descarta que sean los mismos que del caso ante­rior”, comentó el suboficial de la Comisaría 2.ª de Encarna­ción, Arturo Ávalos, en con­versación con el canal de noti­cias NPY.

Si bien las investigaciones continúan y la presencia poli­cial aumentó en la zona, los trabajadores y locatarios del lugar se encuentran atemo­rizados, ya que pueden ser las siguientes víctimas de los motoasaltantes que solo tardan minutos en alzarse con toda la recaudación y los objetos de valor de los loca­les e inclusive de los clientes.

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LAMBARÉ

En la ciudad de Lambaré, dos hombres a mano armada ingresaron a un local comer­cial ubicado sobre la calle Pedro Juan Caballero casi Cacique Lambaré, intimi­dando a los clientes y a los cajeros para llevarse una millonaria suma de dinero, además de varios celulares. Todo lo ocurrido quedó gra­bado en las cámaras de segu­ridad del lugar.

Los dos hombres, quienes para no ser identificados en el momento del robo lle­vaban puesto sus cascos y tapabocas, llegaron hasta el sitio en el horario ya de cierre, con el propósito de alzarse con la recaudación del día. Según la denuncia, finalmente se llevaron la suma de G. 9.000.000, ade­más de varios teléfonos celu­lares del local y de los clien­tes presentes.

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