Enluta otro brutal caso de feminicidio, ocurrido el domingo último en Lambaré, y que tuvo por víctima a Katia Monserrath Brítez Torres, de 20 años, atropellada por su expareja, pese a que tenía prisión domiciliaria. La ministra de la Mujer, Cynthia Figueredo, analizó la situación actual de violencia contra las mujeres, así como las medidas necesarias para combatir y prevenir estos hechos, durante el programa “Así son las cosas”, emitido por Universo 970 AM/Nación Media.
“Es un fenómeno casi pandémico, creo que debemos de reconsiderar las condiciones en las que estamos viviendo, es imperioso que nos sentemos todas las instituciones y sociedad civil a reflexionar sobre estos temas, y a ajustar todos los protocolos que se puedan ajustar, y que nosotros no solo podamos reaccionar al momento en que exista una situación como esta, sino que más bien evitar llegar a esta situación”, indicó la ministra Figueredo.
Destacó que una de las estrategias también necesarias es fortalecer la educación en la prevención, no dejar de remarcar a la sociedad en general y en especial a las mujeres en qué casos deben de pedir ayuda a las autoridades y qué signos deben alarmar. “Normalmente no empieza con un golpe, también puede pasar, pero en la mayoría de los casos empieza limitando acciones, no dejando que su pareja haga o diga tal o cual cosa, o asista a un evento o tiene escenas de celos”, manifestó la ministra.
Respecto a las penas privativas de libertad y el sistema judicial en este ámbito, Figueredo respondió: “La celeridad de los casos judiciales también es un punto que hay que analizar, es importante y tenemos que revisar para que estos sean realmente efectivos porque aquí hablamos de que están en riesgo vidas humanas”.
HABLA OTRA EXNOVIA
Una exnovia de Osvaldo Zaracho reveló que también había sido víctima de violencia por parte de su entonces pareja. Dijo que tenía solo 18 años cuando empezó la relación y tuvo que romper sus vínculos con el hombre precisamente porque la golpeaba. La joven habló con la 1000 AM cuidando de no revelar su identidad para protegerse de Zaracho. Aseguró que Osvaldo “fue siempre impulsivo”. “Me llegó a tocar, pero siempre él decía que era jugando. Me llegó a pegar y me llegó a romper el celular, me llegó a perseguir también dos veces”, refirió.
Presunto feminicida debió recibir ayuda psicológica
El psicólogo Osvaldo González consideró que el joven Osvaldo Luis Zaracho Fernández, imputado por asesinar presuntamente a su expareja Kathia Monserrath Brítez Torres, debió ser sometido a un régimen de asistencia psicológica, paralelamente a las medidas restrictivas que le impusieron en el marco del proceso judicial.
Como en este caso se trata de una pareja de jóvenes (víctima y victimario), afirmó que se debió ofrecer tratamiento psicológico como parte del proceso de reinserción a la sociedad.
Esto, considerando que pese a las medidas privativas de libertad que tenía el sujeto, se manejaba con absoluta impunidad. “A veces se le obliga en los papeles a la persona que vaya a buscar ayuda psicológica, pero finalmente no es así. Y nadie controla y en ese sentido algo importante es la impunidad que hay en ese sentido”, señaló en diálogo con el canal GEN/Nación Media, en el programa “Duro de callar”.
Afirmó que el presunto autor del feminicidio debe permanecer encerrado. “Claro que tiene que estar encerrado, tiene que haber una sanción para eso. O sea, no puede quedar impune, justamente por la impunidad es que siguen habiendo este tipo de casos”, expresó.
Nuevo caso urge aplicación de tobilleras electrónicas
Este nuevo caso de feminicidio desnudó la urgencia de reglamentar la Ley 5863, promulgada en 2017, que aplica la utilización de tobilleras electrónicas, destinadas al control de personas con problemas judiciales. Tras este trágico crimen, la abogada Alejandra Peralta Merlo, magíster en Derechos Humanos, remarcó la urgencia de reglamentar la Ley 5863, que incluyó el Sistema de Monitoreo por Dispositivos Electrónicos de Control (Simdec) en nuestro sistema penal. Además, en el 2020 fue promulgada la Ley 6568, que autoriza el uso de estos dispositivos electrónicos con personas procesadas por violencia doméstica, pero aún es “letra muerta”.
“Con esto podrían salvarse muchas vidas”, aseguró en contacto con Hoy Digital/Nación Media. La abogada enfatizó que las nuevas autoridades deben destinar los recursos necesarios para la puesta en vigencia de la legislación, teniendo en cuenta que ya transcurrieron 6 años desde la promulgación de la ley y sigue sin ser aplicada. Peralta señaló que la Policía Nacional debe tener la suficiente capacidad operativa para actuar en caso de violación del arresto domiciliario, que será constatado con la alerta emitida por las tobilleras electrónicas. “Una rápida respuesta es lo que permitirá que realmente tenga sentido, porque si la Policía llega en 30 o 40 minutos al lugar, como sucede generalmente cuando alguien llama al 911, entonces la situación podría ser otra”, afirmó