En el barrio Cardinal de la ciudad de Fernando de la Mora los vecinos están cansados de los delincuentes que todos los días ingresan a sus viviendas para llevarse objetos de los patios, ya sean mangueras, sillones, cocinas, entre otros.
Afirman que pese a las reiteradas denuncias los agentes de la comisaría zonal nada hacen para frenar la ola de inseguridad.
“Tenemos miedo hasta para salir a nuestro jardín”, lamentó Santiago Fernández, en entrevista con La Nación/Nación Media, un vecino que fue víctima de los delincuentes y de cuya vivienda se llevaron una cocina, alargues y cables. Denunció que es la segunda vez que se ingresa a su propiedad en las últimas semanas.
Resaltó que los malvivientes operan por las noches y especialmente en horas de la madrugada, lo que genera un temor en la zona porque en ese horario están durmiendo en sus casas. “No es mucho lo que me robaron, pero imaginate que estén armados e ingresen a las casas o que salgamos con la intención de ahuyentarlos. Nos sentimos impotentes”, señaló.
Fernández relató que sus vecinos les confirmaron que también ya fueron víctimas de los ladrones, entre ellos un mecánico, cuyos vehículos de sus clientes fueron saqueados; en otra oportunidad intentaron robar los aires de una iglesia y así suman la lista de víctimas. “Hacemos las denuncias, pero de ahí no avanza, a lo mejor dicen que es poca cosa, pero la violación a nuestra propiedad y la inseguridad con la que vivimos es el verdadero problema por el que estamos pasando”, detalló.
Apuntó que estas personas ingresan a cara descubierta y sin temor a nada, además, que lo vecinos confirmaron que estos malvivientes andan rondando la zona todo el tiempo, lo que obliga a los residentes a vivir prácticamente encerrados.