La Administración Nacional de Electricidad (Ande) tiene pérdidas anuales de USD 80 millones a causa de las conexiones clandestinas. Hay asentamientos donde ni la Policía Nacional ni los funcionarios del ente pueden ingresar para realizar los controles, según el gerente comercial Rody Rolón. “El tema de las pérdidas es una de las metas más complejas. Nosotros según nuestro plan estratégico 1.5 es la meta que nos hemos fijado para este año. Implica recuperar millones de kilowatts/hora (kWh). Eso es mucho, si haciendo esos números fríos realmente la Ande mucha inversión podría hacer, si las pérdidas se disminuyeran”, señaló a la 680 AM.
El abogado Rolón expresó que las cuestiones socioeconómicas no justifican que se cometan hechos punibles. “Yo creo que hay un relajamiento moral de la gente, cree que sustraer energía eléctrica no es un delito. O sea, lo hacen naturalmente sin tener ningún escrúpulo”, afirmó.
Mencionó que en algunos lugares ni los funcionarios de la Ande ni los agentes policiales “se animan a ingresar” para verificar la sustracción de la energía eléctrica. “Tenemos que ver otras estrategias: asistentes sociales. “Realmente es un trabajo muy arduo el tema del combate a las pérdidas eléctricas. Es una cuestión socioeconómica-moral, asociaron muchos ingredientes para poder tratar de justificar”, indicó. Rolón reiteró que se genera un “gran perjuicio a la Ande” y a todo el país. “La Ande como empresa pública debe prestar un servicio de calidad. Pero si no tiene una recaudación a lo que cuesta el servicio, obviamente no va a llegar a esa calidad que todos deseamos”, sostuvo.
ALTA MOROSIDAD
Otro grave problema que afronta la institución es la alta morosidad de los clientes. Rolón especificó que un 30 % de los usuarios son morosos, unos 385.000 deben 3 facturas o más.