• Pedro Juan Caballero
• Por Emerson Dutra
• corresponsal.

Los trabajos de ubica­ción y posterior des­trucción de los culti­vos de marihuana se centran en colonias de la ciudad de Capitán Bado, distante a unos 100 kilómetros de la capital departamental.

Como la plantación de drogas se realiza en medio de cerra­dos bosques, los uniformados utilizan helicópteros para lle­gar hasta su objetivo. Tras ase­gurar el perímetro, comienza el trabajo más pesado que es la destrucción de los cultivos de yerba maldita.

Datos revelan que, en tres días, la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) logró destruir 400 toneladas de marihuana, ocasionando un perjuicio patrimonial a los narcotraficantes que sobre­pasa los 35 millones de dóla­res americanos.

Lo que más llamó la atención de los agentes fue el hallazgo de cuatro campamentos que se encontraban interconec­tados, equipados con gene­radores y logística para la producción de la droga tipo “premium”. Se trata de un tipo de droga que posee una alta calidad, lo que hace que sea muy requerida por los narcotraficantes.

Solamente ayer, los unifor­mados destruyeron 5 tonela­das de marihuana prensada, 30 tambores con droga enva­sada al vacío y 400 bolsas de esa yerba picada. De acuerdo a los datos, Alianza 37 cuenta con el apoyo de militares de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), Fuerza Aérea y el acompañamiento de la Fis­calía y la Policía Federal bra­sileña.