San Ignacio, Misiones, fue centro ayer de la tradicional procesión de la Virgen La Dolorosa, con el acompañamiento de los estacioneros y miles de personas con antorchas y candiles que participaron del vía crucis en Tañarandy.
Unas 20 mil velas iluminaron el camino del peregrinaje o “yva rape” (camino al cielo), que empezó en la capilla de la pequeña comunidad de Tañarandy hasta la Barraca, taller del destacado artista plástico Koki Ruiz. Imágenes impresionantes fueron captadas por los presentes, tanto de la procesión como de los cuadros vivientes que presentaron en la Barraca.
De la peregrinación participaron niños, jóvenes y familias enteras que se llegaron desde distintos lugares del país y del extranjero. La procesión desde la capilla hasta el taller del Koki Ruiz es de 2 kilómetros aproximadamente.
Koki Ruiz resaltó que la actividad es la más importante para todo el pueblo, los preparativos comenzaron hace un mes, e involucraron a unas 300 personas. Tras siete años de pausa, este año nuevamente se puede apreciar los cuadros vivientes.
La recreación de los cuadros son grandes artistas. “Es una mezcla de religiosidad popular y arte”, detalló el artista.
Tañarandy, que significa tierra de los irreductibles, ofrece cada año, desde 1992, un espectáculo de arte y de fe de la mano del artista Delfín Pérez Roque Ruiz, conocido como Koki Ruiz, creador y promotor principal de esta celebración.