Teniendo en cuenta que el agua es un nutriente esencial para la vida y para el cuerpo humano, debido a que participa en casi todos los procesos fisiológicos, por lo que es una sustancia indispensable, la recomendación es beber al menos 8 vasos de agua por día para mantener el cuerpo bien hidratado y así lograr un buen funcionamiento metabólico.
Desde el Ministerio de Salud señalan que entre los beneficios de la ingesta adecuada de agua se destaca que regula la temperatura corporal, especialmente durante el ejercicio, mediante la producción de sudor (mecanismo eficaz de enfriamiento para prevenir el exceso de calor del cuerpo que puede desencadenar golpe de calor).
Así también, regula la presión sanguínea, ayuda a prevenir numerosas enfermedades, entre ellas el estreñimiento, sobrepeso, la obesidad, la hiperglicemia, y mejora la digestibilidad y facilita la absorción de nutrientes.
DESHIDRATACIÓN
Cuando la ingesta de agua es menor a la recomendada, en el organismo puede producirse una deshidratación, confusión mental, pérdida del equilibrio, caídas con 2% de deshidratación, especialmente en personas adultas mayores. Es por eso que para lograr una correcta hidratación, aconsejan que al despertarse en la mañana se consuma un vaso (250 ml), puesto que contribuye a activar y limpiar los órganos. Del mismo modo, antes, durante y después de realizar actividad física, para reponer líquido y electrolitos.
Del mismo modo es importante beber agua antes de ir a dormir, un vaso (250 ml), ya que ayuda a prevenir calambres musculares en las noches y derrames cerebrales.
En cuanto a la lista de frutas y verduras de estación con mayor porcentaje de agua, citan a la sandía, melón, piña, pera, mamón, naranja, frutilla, mandarina, entre las frutas. Mientras que entre las verduras están el tomate, el pepino, la berenjena, la lechuga, el zuchini, el apio, el perejil, el berro y la acelga.