A primeras horas de ayer se realizó una requisa en tres pabellones de la Penitencia­ría Nacional de Tacumbú, en la que se incautaron de al menos más de 30 puñales, 30 varillas, 31 planchuelas y 3 lanzas. Los calabozos en los que se realizaron los proce­dimientos corresponden en su mayoría a integrantes del clan Rotela.

“Teníamos infor­mación de que había muchos estoques, cuchillos y corría peligro la integridad de las personas privadas de libertad que están bajo nuestro cargo, por eso realizamos la requisa. Entramos con una gran canti­dad de agentes penitenciarios. Todo bajo control”, afirmó René Alvarenga, interventor del penal de Tacumbú.

Un pelotón de policías rea­lizó el procedimiento, cuyo objetivo sería garantizar la convivencia de las personas privadas de su libertad ante posibles ataques entre ban­dos contrarios. Igualmente, no sabrían definir a quiénes pertenecen las armas blancas debido a que los internos fueron sacados de sus pabello­nes. “Estamos realizando una radiografía de lo que pasa en la penitenciaría para comuni­carle al señor ministro (Édgar Olmedo). No tenemos defi­nido a quiénes pertenecerían las armas. No identificamos aún a las personas porque hay quienes no pertenecen a nin­gún clan”, expresó Alvarenga.