El director del Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT), Gustavo Melgarejo, señaló que el pedido del Ministerio de Salud para que el Instituto de Previsión Social (IPS) rea­lice una cirugía compleja al pastor evangélico Emilio Abreu se trata de una cues­tión de salud y la vida de una persona. Negó también que haya injerencia porque todas las personas tienen los mis­mos derechos.

“Es una cuestión de salud. La gente no está acostum­brada, pero el sistema admi­nistrativo de salud tiene que ser rápido porque se trata de una vida humana. Nosotros como INAT priorizamos la vida humana”, explicó este domingo el director en una entrevista con canal Trece.

Sostuvo que al filtrarse la información sobre la solici­tud realizada al IPS se trans­gredió la ley de confidencia­lidad que rige para todas las personas y que fue creada para proteger a los beneficia­rios, independientemente a la condición económica, social y política del solicitante, por­que es un programa “bien específico”.

Melgarejo indicó que la polé­mica se desató al filtrarse el documento de la solicitud y porque muchas veces la gente no sabe sus derechos como la posibilidad de acce­der a una misma cirugía sin costo alguno sin distinción de la situación económica, pero se priorizan a los pacientes de acuerdo al estado de salud de cada uno.

“La gente tiene que saber sus derechos de salud. El IPS está para los asegurados, pero esta herramienta permite que las personas no aseguradas se hagan un tratamiento de alta complejidad, financiado por el Ministerio de Salud. Si todos estos procedimientos no se hicieran, la gente iba a seguir muriendo y es eso lo que no podemos permitir como para­guayos”, agregó.

El IPS realiza desde el 2018 trasplantes de médula ósea mediante un convenio sus­crito entre el IPS, el Ministe­rio de Salud Pública y el Ins­tituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT); este último solventa los costos de los tratamientos para pacien­tes no asegurados. Mediante el acuerdo se da cobertura a pacientes por montos que van desde G. 20.000.000 hasta G. 800.000.000, apro­ximadamente, dependiendo del tipo de trasplante que se realiza.