El viceministro de Salud, Hernán Martínez, aclaró ayer que la cartera sanitaria no recibió ninguna información oficial de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ni de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) que desaconseje el uso de los tapabocas de tela.
El titular de Atención Integral explicó que la mascarilla quirúrgica contiene un material que sí está preparado con filtros adecuados al igual que la KN95 para evitar los contagios de cualquier enfermedad viral. No obstante, las de telas no tienen la misma efectividad y eficacia, señaló.
“El quirúrgico y la KN95 ofrecen mucha más protección que uno de tela, pero entre tener y no tener, es mejor llevarlo puesto si no se cuenta con los que son recomendables”, expresó en diálogo con radio 1080 AM. “El quirúrgico y KN95 protegen más, pero el de tela también protege y es mejor usar ese que no usar nada”, aseveró. El viceministro aconsejó que toda persona cuente con un par de cubrebocas, y en caso de que uno esté humedecido, cambiarlo para que no pierda la efectividad.
Días atrás, la doctora especialista en terapia intensiva de adultos Leticia Pintos Casamayouret compartió con sus seguidores en su cuenta de Twitter un gráfico elaborado por el diario mexicano El Heraldo, que cita como fuentes a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Washington University School of Medicine, sobre el porcentaje de efectividad que tiene cada tipo de tapabocas.
Según la imagen, los tapabocas más efectivos contra las variantes Ómicron (95%), Delta (96%), Alpha (98%) y a las bacterias (100%) son el N95 y el KN95. El porcentaje de efectividad cae estrepitosamente para los tapabocas de tela (algodón, poliéster, lycra, nylon) y los de esponja.