La Justicia deja un importante precedente sobre el derecho de los niños a la alimentación y la obligación de los padres a brindársela. Se trata de un caso que se hizo público y se viralizó y que tiene como protagonista a Emiliano Sanabria Benítez, quien deberá guardar reclusión en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú de Asunción por incumplir su deber alimentario con sus cuatro hijos.
La agente fiscal Sandra Ledesma, de la ciudad de Luque, departamento Central, intervino en el caso denunciado por la madre de los hijos de Sanabria Benítez por violación o incumplimiento del deber alimentario.
Tras realizarse el debido proceso, el Tribunal de Luque dictó una condena de cuatro años de pena privativa de libertad para el hombre. Esto, al comprobarse el hecho punible de incumplimiento del deber legal alimentario.
El mismo deberá cumplir su condena en el penal de Tacumbú, hasta donde fue trasladado al terminar el juicio, teniendo en cuenta que tiene varias causas abiertas por otros hechos punibles.
Durante el juicio oral, la representante fiscal comprobó la responsabilidad del acusado y demostró que no depositó el monto de G. 800.000 mensual que el Juzgado de la Niñez le había impuesto destinar en una cuenta abierta a nombre del juicio y teniendo como destinatarios a sus cuatro hijos.
El Ministerio Público pudo comprobar que el acusado, a pesar de tener la capacidad física real para abonar la cuota alimentaria, no depositó dicho monto y le ocasionó un perjuicio a sus hijos, menores de edad y escolarizados, confirmando el dolo con el que actuó el acusado.