Hoy se conmemora un aniversario más del inicio de este desafío editorial que lleva más de un cuarto de siglo sostenido gracias al trabajo duro y el profesionalismo.

El 25 de mayo de 1995 nació el Diario La Nación con el desafío de erigirse como una voz nueva independiente en el mercado local de medios. El eslogan “Es de todos” lo acompañó por muchos años siendo un diario generalista, en el que la información veraz buscó siempre mantenerse cerca del interés y la necesidad de la gente. La apuesta en ese momento era incomparable.

Una propuesta edilicia de vanguardia que fue pensada especialmente para el proyecto editorial, con tecnología de punta, a la cual se sumaba una gran conjunción de periodistas jóvenes y figuras con experiencia que hacían posible que La Nación arrancara ya como grande en ese momento, sin olvidar la conducción de excelentes profesionales del periodismo de la región que formaron parte del proyecto.

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“Una voz independiente para un nuevo Paraguay” fue el titular de la tapa del 25 de mayo de 1995, y 26 años después la afirmación como propuesta sigue estando más que vigente. Ahora como parte del Grupo Cartes y como eje del Grupo Nación, el holding de medios más importante del país, el Diario La Nación sigue cerca de la gente informando y construyendo opinión con periodistas de primer nivel.

Las narraciones de los eventos más importantes de la historia reciente del Paraguay llegaron a la gente a través de las páginas de La Nación. Mundiales de fútbol, conspiraciones políticas, crisis económicas, visitas ilustres, conciertos históricos, el bicentenario patrio, tragedias, elecciones, milagros, inversiones y todos los hechos más significativos de la joven democracia nacional. Hoy la pandemia se ubica el centro del interés de todos y detrás de cada noticia un trabajador de La Nación se encuentra buscando la información de calidad que debe llegar a todos los paraguayos y paraguayas.

“Lo que busca el fotoperiodista no cambia”

Carlos Juri.

“Así como cambió el periodismo en algunas cosas, también lo hizo el fotoperiodismo: en su dinámica. Primero por la tecnología, ahora las fotos ya son para publicarlas al instante, cambió en la inmediatez. También hizo más profesional y más completo al reportero, tiene que saber hacer todo.

Pero lo que pasa cuando toma la cámara un reportero gráfico, lo que busca el fotoperiodista no cambia, él tiene que contar lo que ve, eso siempre es lo esencial”, explica Carlos Juri, editor en jefe del Departamento de Fotografía, cómo el paso del tiempo fue cambiando la dinámica de producción en varios aspectos, pero no lo central.

Juri comenta que en sus 26 años en el diario pasaron 53 reporteros gráficos, y rescata a dos que para él son insignia: “Aníbal Gauto era un reportero gráfico con todas las letras, tenía los principios que hay que tener, era de pura cepa; y otro es Pánfilo Leguizamón, él tiene todo, es un fotógrafo completito”.

“El factor humano y profesional fue fundamental”

Ivelice Villalba.

“El factor humano y profesional fue fundamental para mantenerse como un medio de comunicación creíble, que cumple con su función de informar, generar opinión, influenciar en las decisiones del país”, señala Ivelice Villalba, editora de la Sección País, quien es una de las periodistas que más áreas cubrió y que se lució siempre por su calidad humana.

Empezó en 1995 en la sección Política, después trabajó en Artes y Espectáculos, Mujer, Interior, Tendencia, Negocios, Revista y Productos Especiales, siendo siempre una profesional eficiente y todoterreno.

“Creo que un medio de comunicación para permanecer en el tiempo, a parte de innovarse, debe mantener sus principios básicos de informar verazmente los hechos, es decir, buscar y contrastar noticias con los protagonistas. Aparte de generar opiniones basadas en los principios fundamentales del ser humano”, señaló uno de los ejes de trabajo de La Nación.

“Descubrí mi pasión por la fotografía”

Pánfilo Leguizamón.

“En 1993 llegué a trabajar como constructor en lo que ahora es el edificio del diario, después en febrero de 1995 me contrataron como guardia de seguridad del edificio, estuve 9 meses. De ahí pasé a ser recepcionista durante 3 años y en mis horas libres pasaba a practicar en el laboratorio de fotografía. Tiempo después me llamaron a formar parte exclusivamente del laboratorio, ahí estuve 7 años, y un día el jefe de fotografía me dijo que saldría a la calle como reportero gráfico”, resume con simpleza Pánfilo Leguizamón su historia como parte del Diario La Nación, que para él supera los 26 años del medio.

“Al salir de cobertura a la calle tenemos un gran desafío que vencer, pasamos cosas buenas, así como cosas no tan buenas. Con el transcurso de estos años descubrí mi pasión por la fotografía”, explica. Pánfilo es una de las personas emblemáticas del diario y una figura fundamental en el Departamento de Fotografía, al que considera su segunda casa y desde donde celebra a los “compañeros que realmente nos hacen sentir como una familia”.

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