Vigilancia de la Salud advierte que utilizando correcta­mente la mascarilla, evi­tando conversar, comer ni tomar tereré o mate durante el viaje se puede evitar conta­gios en el transporte público. Según una medición de CO2 realizada recientemente por esta dirección del Ministe­rio de Salud en transportes públicos, reportaron niveles que superan el umbral reco­mendado de 1.000 ppm (par­tes por millón) de dióxido de carbono (CO2) en buses con ventanillas cerradas.

En un bus con acondicionador de aire encendido, ventani­llas cerradas y 8 pasajeros, en minutos se registró un rango de CO2 fuera de lo recomen­dado de 1.224 ppm. Ante el alto nivel, abrieron una de las ven­tanillas y en muy poco tiempo el rango comenzó a descender.

En otra unidad con más de 30 pasajeros a bordo, a los siete minutos de instalarse el dispositivo de medición se detectaron concentracio­nes alarmantes de CO2 que iban en aumento. Los agentes procedieron a informar de la situación a los pasajeros y se les pidió abrir las ventanillas, pero lamentablemente todas estaban selladas.

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En un viaje de 45 minutos en transporte público con ven­tanillas abiertas, con 23 pasa­jeros a bordo, todos sentados, el medidor de CO2 reportó un nivel de 510 ppm. Esto comenzó a aumentar cuando una pasajera se bajó la masca­rilla y se puso a hablar. Se le instó a colocarse la mascari­lla y el CO2 bajó.

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