Nuevos incidentes se registraron ayer cerca de las 17:00 en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, donde un grupo de reos empezó a quemar colchones como medida de fuerza. A tempranas horas se había producido un hecho similar. Una densa huma­reda pudo divisarse desde el recinto penitenciario, pudiendo ser apreciada desde varios kilómetros de distan­cia, sobre todo en la capital.

Al menos 17 guardiacárceles fueron tomados como rehe­nes, según informes prelimi­nares de los medios de comu­nicación apostados frente a la Penitenciaría Nacional de Tacumbú.

Efectivos antimotines y del Grupo Lince de la Poli­cía Nacional ingresaron a la penitenciaría para tratar de controlar la situación. Igual­mente, compañías de bom­beros voluntarios llegaron para acompañar las labores de extinción del fuego, según informó el canal GEN.

Aunque la Policía dijo que la situación se controló, los voluntarios se vieron obliga­dos a replegarse debido a la tensa situación que se vivió en el interior del penal, ya que fueron ellos los que informa­ron que hay guardiacárceles que fueron tomados como rehenes, mientras que algu­nos policías salieron no solo heridos, sino además comple­tamente desorientados.

Esta situación sería en repu­dio al traslado de Orlando Efrén Benítez, un conocido asaltabancos que fue remi­tido más temprano a la Agru­pación Especializada, luego de descubrirse un supuesto plan de fuga para liberarlo de su lugar de reclusión. El mismo pertenecería a la banda del Primer Comando Capital (PCC). El hombre poseía una cantina en la cár­cel de Tacumbú, donde ven­día productos permitidos; sin embargo, se descubrió que también comercializaba drogas.

Los 17 guardiacárceles toma­dos como rehenes fueron libe­rados luego de una reunión mantenida con la ministra de Justicia, Cecilia Pérez, según la misma informó. “No hay más ningún guardia que no esté hacia adelante”, refirió.

“Conversamos con ellos. A ambas partes les pedi­mos una salida pacífica. Ellos pidieron que no se tome represalia en su con­tra y que tengan un trato igualitario con ellos”, continuó su relato la ministra.

“Los reclusos reclamaron el traslado de Orlando Bení­tez, dijeron que fue injusto y les explicamos por qué se le trasladó y comprendieron. Se comprometieron a mantener la calma a cambio de que no haya represalias y se retire la Policía”, subrayó Pérez.

Representantes del Ministerio Público confirmaron que tal como se venía mencionando, efectivamente hay al menos seis falleci­dos tras el amotinamiento registrado en el día de ayer en el penal de Tacumbú; se trata de personas privadas de su libertad. Sin embargo, no se descarta que más reclusos hayan sido asesinados durante el disturbio.

Los datos manejados son aún preliminares; por lo tanto, no es posible dar a conocer las identidades de las víctimas, por el momento, mencionó el fiscal Giovanni Grisetti, luego de verificar el establecimiento penitenciario. Agregó que todavía faltan regis­trar varias zonas del penal.

Los fallecidos fueron identificados como Alexis David Miranda Can­dia, Carlos Raúl Casco Rojas; Fernando Ortiz Echeverría, Julio César González Cáceres, Julio César Shareamm Barrios y Roberto Ríos.

Los cuerpos fueron trasladados hasta la Morgue Judicial para las inspecciones de rigor. Familiares de los internos, quienes desde la tarde estaban en el lugar, cuestionaron la falta de información y exigen saber noticias sobre sus familiares recluidos.