En diciembre pasado se creó el Instituto Nacional de Estadística (INE), que reemplazó a la anterior Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos (DGEEC). Actualmente, Iván Ojeda es el director, quien manifiesta que se trata de una entidad que proporciona datos e informaciones claves para la toma de decisiones políticas y sociales para el desarrollo del país.
El gran desafío es el Censo Nacional de Población y Viviendas 2022, que incluye el Censo Indígena. “Esta es la única oportunidad en que la sociedad tiene la posibilidad de formular políticas públicas, porque le están diciendo al Estado cómo están viviendo, qué es lo que necesitan”, sostuvo Ojeda. Consideró que el cambio de DGEEC al INE implica un hito en la historia estadística paraguaya, pues luego de 78 años se ha implementado la modernización del sistema estadístico nacional con la creación del Instituto Nacional de Estadística (INE).
“Esta normativa es el resultado de la ley genérica planteada en el seno de la Conferencia Estadística de las Américas de la Cepal (Comisión Económica para América Latina y el Caribe), que a su vez es el resultado de un estudio realizado por las Naciones Unidas a 18 países, que a su vez es parte de un estudio a 18 países en lo que respecta a sus legislaciones. Tener una nueva ley de estadística demuestra el mejor rostro que puede mostrar el país, así los ciudadanos tendrán más y mejor información”, dijo.
Ojeda indicó que estarán visitando los hogares del país para la actualización cartográfica y en el segundo semestre del 2022 tendrán el levantamiento censal. “Este operativo es la mayor movilización ciudadana de cualquier país en tiempos de paz, van a salir 210.000 compañeros voluntarios en tareas de supervisores y censistas a visitar lo que estimamos sean 1.900.000 viviendas, esperando encontrar aproximadamente una población de 7.500.000 habitantes”.