En la mañana de ayer fue detenido en San Lorenzo el peligroso asaltante Roque Jacinto González, alias Py Guasu, de 48 años, supuesto líder de los malvivientes. Está sindicado últimamente como cabecilla de un asalto registrado en Itá. Primeramente se llevaron G. 10 millones al irrumpir dos delincuentes en una casa familiar en Itá el pasado domingo. Regresaron el lunes para robar la millonaria suma de G. 150 millones a una joven que es administradora de la firma de estaciones de servicio que posee la familia.
En aquella ocasión, los delincuentes huyeron a pie del lugar en una zona boscosa porque el vehículo había quedado averiado. Fueron perseguidos, reducidos y detenidos por personal policial. Se trata de Diego Rubén Duarte Sanabria, de 30 años, y Damián Cáceres Núñez, de 44 años, quienes tenían en su poder G. 40 millones, parte del botín que fue recuperado. Luego de la detención, obtuvieron datos sobre la ubicación de Roque “Py Guasu”, quien fue detenido horas después en la ciudad de San Lorenzo, al tratarse del líder intelectual de la banda de delincuentes.
La titular del ministerio de Justicia, Cecilia Pérez, dijo con relación a la detención: “Tengo entendido que él se escapó y tenía una orden de captura. Habría que ver también cuántos procesos tiene. A veces tienen algún tipo de medida en una causa, pero pendientes en otras causas y ahí se generan confusiones. Yo les puedo asegurar que no estaba preso; si estaba preso, iba a ser nomás luego novedad porque esos perfiles siempre están dando noticia adentro”, expresó Pérez.
González cuenta con antecedentes policiales desde el 2004 por casos de robo agravado, hurto agravado y homicidios. La mayoría se concretó entre el 2004 y el 2009. El primer hecho grande en que fue involucrado fue en el asalto a una sucursal bancaria en Ciudad del Este, en tanto que en el 2006 logran rescatarlo cuando era trasladado a una audiencia judicial, luego escapó al Brasil.
Sin embargo, Roque Jacinto González negó ser el líder de una banda de asaltantes y se declaró inocente del millonario robo de G. 150 millones a una familia de Itá. Manifestó que actualmente ya no comete delitos y que al ser capturado, se encontraba a la espera de un supuesto tratamiento por un problema de salud.