Celia Samudio, oriunda de Ciudad del Este, manifiesta que en julio del 2018 se realizó la cirugía de lipoescultura llevada a cabo por el Dr. Alexis Gallagher en el Sanatorio Americano, la operación tuvo una extensión de 8 horas; luego, en la madrugada tuvo dificultades para respirar y al día siguiente la ingresaron a terapia intensiva en el mismo centro asistencial por 3 días, con un diagnóstico que indicaba una tromboembolia pulmonar bilateral, luego fue trasladada al IPS y al ser dada de alta, tuvo una necrosis en el abdomen. Regresó con el Dr. Gallagher y expresó que la herida cada día empeoraba más y el médico insistía en no derivar la situación a otro especialista.
“Desesperada acudí al Centro Nacional del Quemado (Cenquer), ahí encontraron 4 tipos de bacterias en mi abdomen, me sometieron de urgencia a cirugías y me salvaron la vida”, acotó.
VERSIÓN DE MÉDICO
El médico cirujano Dr. Alexis Gallagher, imputado por lesión grave tras ser denunciado por una aparente fallida cirugía estética, desmintió las acusaciones de la paciente. El mismo sostuvo que todas las denuncias son falsas y acusa a la fiscala Stella Maris Cano y al abogado y ex juez Andrés Casati de armar la farsa e intentar extorsionarlo. Alegó que la intervención quirúrgica fue correcta, pero que la mujer se hizo la curación con otro profesional y que ahora busca extorsionarlo, denunciándolo por mala praxis.
“El Dr. Casati directamente me quiso extorsionar, dijo ‘o te vas a la cárcel o cuánto estás dispuesto a pagar’. Yo me negué porque estoy muy seguro de mi trabajo, ni siquiera sé cuánto pedían, además ambos son conocidos por sus trabajos turbios, extorsiones, enriquecimiento ilícito y cuentas secretas en Suiza y Panamá”, dijo.
Agregó que empezaron a desesperarse luego de que él presentara una denuncia en el Juzgado de Enjuiciamiento de Magistrados contra la fiscala Stella Maris Cano, quien es amiga de la paciente, y el abogado Andrés Casati.
“La fiscala no incluyó en la carpeta fiscal ninguno de los documentos que me eximían, tampoco me quiso tomar la declaración, tampoco se realizó hasta la fecha el peritaje médico para conocer de quién es la responsabilidad de lo acontecido con la paciente”, lamentó.
Argumentó que la paciente miente, “nunca se llegó a diagnosticar tromboembolia pulmonar, su vida nunca estuvo en peligro y resulta que la imputación es por lesión grave, dolosa”.
Indicó que Samudio viajó a Ciudad del Este y sin su consentimiento se realizó curaciones. Luego, cuando la situación empeoró, regresó a su consultorio, hecho que no se debió dar.