San Francisco es el santo de la naturaleza y los animales. Es por ello que los hermanos Franciscanos Capuchinos realizaron ayer la bendición de los animales de compañía (mascotas) que fueron llevados hasta las capillas conventuales, tanto de Asunción, Lambaré, Limpio y Ciudad del Este.
Si bien un importante número acudió por la mañana, en horas de la tarde y noche la concurrencia fue aumentando, ya que la gente, al salir de las escuelas, colegios y trabajos, llevó a bendecir a los animales que les hacen compañía y son la alegría del hogar.
Monos, perros, gatos, loros e incluso un erizo y una gallina fueron bendecidos en el transcurso del día en las distintas capillas conventuales. Las personas que viven en las cercanías de los templos llegaron a pie, mientras que la mayoría lo hizo en vehículos, teniendo en cuenta que los pedidos de bendiciones llegaron de todos lados.
“Llegan a pie y en vehículo. No hay así una oración especifica que se reza, sino más bien se le agradece a Dios por ellos y por la intercesión de San Francisco se pide la bendición, que estén libres de los males, de las enfermedades y que sigan siendo la alegría y la buena compañía en las casas”, indicó el padre Valentín Pesente.
El religioso contó que se sintió muy conmovido cuando una señora llevó a su perro que estaba con tratamiento de quimioterapia para que reciba la bendición. “El perro está muy mal, está enfermo, tiene cáncer”, explicó el religioso.
Asimismo, el religioso indicó que la gente respondió positivamente al pedido de artículos de limpieza que había solicitado días pasados. “La gente está respondiendo”, indicó el fraile.
Desde 1992, a iniciativas de la Organización Mundial de Protección Animal, el 4 de octubre se conmemora el Día Mundial del Animal. Sin embargo, en 1980, el papa Juan Pablo II ya había declarado a San Francisco patrono de los animales y los ecologistas, debido a la peculiar relación que tenía el santo con las bestias, a las que llamaba “hermanos”.