El periodista Andrés Colmán Gutiérrez compartió una anécdota con Koki Ruiz, compartiendo esta reflexión: “El arte no es lo que registra la foto, sino lo que nos queda adentro”. Junto al fotógrafo René González llevaron la historia del artista, fallecido este viernes, a los 67 años, sobre la tradición que impulsó en la colonia de San Ignacio Guazú, en el libro “Tañarandy, la revolución del arte” (2012).

“En uno de los momentos de mayor espectacularidad de la puesta en escena de la Semana Santa en Tañarandy, el gran amigo fotógrafo René González le pidió a Koki Ruiz si no podía graduar la luz de los cuadros vivientes, porque las fotos no lograban registrar los detalles a plenitud”, recordó Colmán a través de una publicación en redes sociales.

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“Koki le respondió con una sonrisa: No hay problema, pero yo prefiero que saques las fotos necesarias y luego guardes tu cámara, para sentarte a contemplar y disfrutar de lo que todo esto te transmite. Las fotos guardarán lo que viste con tu cámara, pero tu corazón y tu memoria guardarán lo que no se puede ver ni fotografiar”, agregó.

El periodista comenta que Koki venía repitiendo el concepto del barroco efímero desde hacía años, puntualizando que la obra no es el cuadro que permanece y se puede colgar en la sala, sino lo que siente el artista y lo que siente el espectador en el momento de la representación. “No es lo que registran las cámaras de fotos o de video, sino las sensaciones que te quedan adentro”, dijo.

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En aquel año, el concepto se vio reforzado por las citas de Joseph Beuys, siguió relatando Colmán repetidas durante una de las puestas en escena, casi como una lección escolar: “Cada ser humano es un artista y cada acción es una obra de arte”.

“En Tañarandy todos estamos tan pendientes de capturar las fotos de tanta maravilla, que nos olvidamos de sentir y disfrutar ese momento de creación colectiva, en el que somos también artistas desde el momento que ingresamos a su paisaje social y simbólico”, expresó el comunicador. “Algo de eso hemos intentado narrar con René en nuestro libro ‘Tañarandy, la revolución del arte’ (Oniria, 2012). Ahora que Koki nos deja físicamente, el libro adquiere un valor más especial”.

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