Coronel Oviedo. Omar Jara. Corresponsal.

“Exclamaciones y aplausos se hicieron sentir en el recinto de la Universidad Nacional de Caaguazú (Unca), con sede en Coronel Oviedo, cuando se anunció el nombre de Mónica Santacruz Morínigo entre los ingresantes de la Facultad de Ciencias Médicas, cuya lista se dio a conocer en medio de una alta expectativa de alumnos y familiares”.

Así comenzaba la historia que contábamos en Nación/Nación Media en el año 2018. Hoy, a seis años de aquella auspiciosa noticia (exactamente el tiempo que dura la carrera), Mónica, de 24 años, atrapa su sueño y se convierte en flamante médica. Ni la pandemia del covid-19 pudo detenerla en el camino hacia el propósito que decididamente se propuso.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Estoy celebrando con mucha alegría y orgullo, rodeada de mi familia y amigos que han sido fundamentales en este proceso. Especialmente mi madre, Noemí, quien me ha acompañado y apoyado incansablemente en estos años y a quien le debo gran parte del logro de hoy”, refirió Santacruz a La Nación.

Lea más: Mujeres albañiles egresadas construirán viviendas en proyectos del Gobierno

Mónica celebra su logro con su madre. Foto: Gentileza

“Haber llegado a la meta es un momento muy importante y significativo en mi vida, porque marca el final de un camino recorrido hace 6 años cuando comenzaba este sueño. Y, a su vez, marca el inicio de una nueva etapa llena de oportunidades y desafíos, ejerciendo ya esta carrera que es una parte importante de mi vida”, expresó.

“Estoy orgullosa por todo lo aprendido y experimentado en estos años, y, a la vez, satisfecha por haber influido en aumentar la inclusión y accesibilidad de personas con discapacidad en el ámbito universitario”, afirmó Mónica en esta nueva conversación con el diario La Nación.

La joven, que tiene su residencia en Loyola, en el distrito de San José de los Arroyos (Caaguazú), quedó físicamente en situación de discapacidad debido a una afección que contrajo cuando estaba en el cuarto año de la Educación Media. Le diagnosticaron una malformación arteriovenosa que afectó la médula espinal. Desde entonces no puede caminar y se mueve en silla de ruedas, sin embargo, su ejemplo demuestra que cuando uno se propone no hay barreras que impidan lograr el objetivo fijado.

Lea también: Nick Vujicic inspiró a los socios del Club de Ejecutivos

Mónica Santacruz Morínigo se graduó en la Unca. Foto: Gentileza

Déjanos tus comentarios en Voiz