- Ciudad del Este. Agencia Regional.
Continuó hoy la manifestación de un grupo de extrabajadores municipales de la comuna de Ciudad del Este, en el portón de acceso a la institución. Reclaman el pago de la indemnización que aún se les adeuda por el incumplimiento del acuerdo de hace más de dos años.
A la par que los reclamos por cobros, los carteles expuestos en la manifestación hablan también de la corrupción en la municipalidad y que el jefe comunal debe ir a la cárcel.
Ayer fueron reprimidos por agentes de la Policía Municipal que querían impedir el encadenamiento de algunos de los movilizados, por la reja del cercado perimetral de la municipalidad. “Hasta con gas nos tiraron”, dijo a La Nación/Nación media, Celia Espínola, una de las exfuncionarias en protesta.
La mujer contó que trabajó 30 años en la división de parques y jardines de la comuna, en dos periodos, fue despedida durante la administración de Sandra Zacarías, luego volvió a ingresar ya en la gestión de Miguel Prieto, quien también la despidió junto a otros funcionarios.
Son unos 200 aproximadamente los afectados al acuerdo incumplido, pero un promedio de 50 y 60 personas es el que se mantiene en manifestación, para percibir lo que les corresponde, según la afectada Celia Espínola.
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Mencionó que ya reclamaron mucho y lo único que tuvieron es la respuesta negativa de la Dirección de Finanzas, porque el intendente no puso su cara, hasta ahora, ante ellos.
“Hace unos siete meses que no nos paga el acuerdo que firmamos, donde se comprometía que nos iría entregando en partes, hasta completar el monto, así lo estaba haciendo hasta que paró de pagar”, sostuvo Espínola.
Otro de los manifestantes es Marcio Rodas, quien trabajó 22 años en la comuna como guardia. Se encadenó por el poste de señalización y sostuvo que seguirá presentándose frente al local municipal, exigiendo su derecho de cobrar.
Ayer fue uno de los afectados por la represión a los manifestantes por parte de los agentes municipales. Rodas dijo que el monto adeudado a algunos de los manifestantes oscila entre 5, 10 y 15 millones, pero aun siendo montos bajos para la comuna, no pagan igual.
Los movilizados por el cobro de sus haberes, son en su mayoría personas de la tercera edad y, según refirieron, el intendente Miguel Prieto no puede estar maltratando así a personas que dependen de ese dinero para sobrevivir.
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