Ciudad del Este. Agencia Regional.
El 8 de octubre pasado, en horas de la madrugada, un niño de 12 años ingresó al Hospital Tesãi de Ciudad del Este, con un cuadro de dolor de cabeza, vómitos y náuseas. Estuvo acompañado de su padre, luego llegó la madre.
Tras los estudios de rigor, fue intervenido quirúrgicamente ante el hallazgo de coágulos en la cabeza. Luego de la cirugía, el niño fue derivado a cuidados intensivos, donde sigue hasta hoy.
Cinthia Galeano, jueza de primera instancia de la Niñez y Adolescencia de Hernandarias e interina de Ciudad del Este, dispuso la orden de alejamiento para el padre del niño, con la prohibición de acercamiento hasta unos 300 metros.
El hombre habría maltratado a su hijo ya estando en el hospital y fue agresivo con el personal de enfermería. Se sospecha maltrato infantil. La fiscal Julia González es quien investiga el hecho.
La agente fiscal dijo que fue el asesor jurídico de la Fundación Tesãi, José Maciel, quien realizó la denuncia a raíz de la actitud agresiva del padre del niño, con el personal de salud y con su propio hijo cuando lo llevó al hospital.
“El personal de enfermería fue el que se dio cuenta y lo escuchó al padre decir que el niño estaba fingiendo, además de la agresión al personal de salud. Ante eso, hicieron su reporte, lo que derivó en la intervención de las demás instituciones”, explicó la fiscala González.
La agente dice desconocer la versión de que el niño habría sido objeto de brutal golpiza, porque el informe médico refiere que el paciente no presentó lesiones ni hematomas en el cuerpo y su ingreso fue por las causas ya citadas.
Confirmó que sí fue hallado un coágulo en la cabeza que fue el motivo de la cirugía y el menor está delicado, con pronóstico reservado, según le informaron los médicos.
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Consultada si ya tiene un informe sobre la causa del coágulo en la cabeza, la fiscal Julia González, manifestó que los médicos no le dieron ningún informe todavía al respecto.
No obstante, indicó que ya solicitó el historial clínico del menor y también convocará a los padres para una declaración, una vez que mejore el estado del niño. El paciente vive con su padre porque sus progenitores están separados.
Por esta situación, la madre no pudo aportar sobre lo que sucedió con su hijo porque no se encontraba con ella, según la fiscala Julia González.
La defensora de la Niñez y Adolescencia, Blanca Molinas, informó que ante la sospecha existente sobre la actitud del padre, se solicitó la intervención del juzgado para la medida cautelar restrictiva.
Aclaró que solo intervino al inicio del caso, luego ya quedó a cargo de su colega Nancy Zacarías.
Fue el personal de la subcomisaría 51 del barrio San Miguel el que notificó al padre del niño, sobre la prohibición de alejamiento. Los padres debían comparecer hoy ante el Juzgado de la Niñez y Adolescencia.
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