Luego de que se hiciera público el caso de dos familias que habrían sido estafadas por sus apoderados legales en el cobro de una indemnización por parte de la Administración Nacional de Electricidad (Ande), tras el fallecimiento de dos de sus funcionarios, los involucrados imputados por la fiscalía devolvieron la suma de 300 millones de guaraníes a los afectados.
En medio de lágrimas, Juana Honorina Casco de Ramírez, madre de Marino Ramírez, funcionario de la ANDE fallecido durante un servicio, lamentó que haya tenido que pasar por una situación como esta. En conversación con la 1020 AM, dijo que aún no se logra recuperar de la trágica pérdida y encima debió soportar la estafa.
“Yo iba a aceptar el monto de lo que trajeron y no iba a hacer nada si no fuera por la comunidad de Caaguazú. Gracias a las personas de buena fe, que me ayudaron, logramos arreglar esto. Yo nunca quise hacerles mal a mis propios vecinos”, expresó doña Juana Honorina Casco de Ramírez.
Comentó que con el dinero de la indemnización su idea es poder construirse una vivienda propia y contar con un baño más cómodo, destacando que el monto que le reste lo utilizaría para sus gastos médicos, ya que es de avanzada edad y necesita varios cuidados de salud. “Este será el recuerdo que me deja mi hijo, porque ya no lo podré recuperar”, finalizó doña Juana.
La devolución del dinero a las familias afectadas se realizó en efectivo por parte de los involucrados y se procedió a documentar este procedimiento en una escribanía de la ciudad de Coronel Oviedo, con la participación de los abogados que están llevando el caso ante la justicia.
Lea también: Desbaratan gavilla sindicada de atacar a estancias e implicada en un homicidio