Pedro Juan Caballero (Emerson Dutra, corresponsal)
Los trabajos en la frontera “seca” entre Pedro Juan Caballero y Punta Porá se realizan con gran entusiasmo y velocidad. Con la ayuda de pesadas máquinas, un centenar de hombres llevan adelante el ambicioso proyecto denominado “Frontera del Futuro”, impulsado por la municipalidad de la vecina ciudad brasileña de Ponta Porá.
La inversión es de casi 31 millones de reales (G. 44.209.100.000) que será costeado, en su totalidad, por esa comuna brasileña, el estado de Mato Grosso do Sul y el gobierno Federal de Brasil
Y los cambios, poco a poco, empiezan a notarse. Lo que antes era una simple extensión de tierra que dividía nuestro país con territorio brasileño, hoy día presenta otro aspecto.
Los trabajos se iniciaron a mediados del año pasado y se extenderá, a lo largo y ancho de la línea internacional, por un poco más de 6 kilómetros.
Expectativa
Estacionamientos con capacidad para casi mil vehículos, parque de diversiones para las niños, lugar para evento artístico e, inclusive, una fuente de agua que expedirá chorros a 5 metros de altura también serán colocados en la línea internacional.
Si bien es cierto todo el trabajo de hermoseamiento está a cargo de la municipalidad de la vecina ciudad brasileña de Ponta Porá, no es menos cierto que beneficiará directamente el comercio local.
“Se organizará mejor el microcentro de la ciudad y, con eso, los turistas se verán más atraídos a realizar sus compras en la frontera”, señaló Alejandro Benítez Araña, presidente de la Cámara de Comercio de esta ciudad al tiempo de decir que la agremiación se encuentra expectante por las consecuencias positivas que acarrearía la obra en esta parte del país.