Un sistema de tormentas ingresará desde esta noche en los departamentos Ñeembucú, Misiones, Itapúa y Paraguarí y se expandirá por la madrugada del viernes a Central, Asunción, Cordillera, Caazapá, Guairá, Caaguazú y Presidente Hayes. Por la mañana cubrirá gran parte del territorio nacional, excepto Concepción y Alto Paraguay, donde llegará recién por la tarde del viernes. Luego, entre el domingo al miércoles venideros se pronostica una ola de calor.
La Dirección de Meteorología emitió un boletín de alerta por la alta probabilidad de lluvias y tormentas desde la noche de hoy jueves, con acumulados que pueden rondar entre los 30 y 60 milímetros de precipitación, fuerte actividad eléctrica, granizos y principalmente ráfagas fuertes de vientos que puntualmente pueden superar los 100 kilómetros por hora.
En tanto, Meteorología Encarnación refirió unaviso anticipado ante probable ola de calor. Todos los modelos meteorológicos coinciden en que desde el domingo 22 y al menos hasta el miércoles 25 próximo se tendría altas temperaturas en todo el país, con máximas que estarían por los 40 grados en Itapúa, 42 grados en Central y 45 grados en el norte del país, no descartando valores superiores en algunas localidades.
Lea más: “Cubierta Aty” ya recogió 30 mil kilos de neumáticos e instan a reforzar trabajo
Todo indica que los valores de temperatura tanto mínima como máxima podrían superar los valores establecidos para una ola de calor, por tal motivo se podría hablar de la probabilidad de este evento, incluso para Itapúa. Para el periodo mencionado además se prevé vientos moderados del norte y muy bajos valores en la humedad del ambiente, sólo cercanos al 20 %, por lo que estaremos con alto riesgo de propagación de incendios.
Con respecto al humo, es probable que se continúe con la mala calidad de aire durante ese periodo, incluso que pueda empeorar nuevamente a niveles en los que estábamos semanas anteriores. Después de la tormenta, el pronóstico describe que el sábado será una jornada con ambiente cálido a caluroso, cielo parcialmente nublado a nublado, vientos variables, luego del noreste, lo que implica la vuelta de la humareda de los incendios forestales que ocurren en los países vecinos.