La Policía Nacional efectuó tres allanamientos simultáneos este jueves en el barrio Santa Ana de Asunción, Luque y Capiatá y de momento fueron detenidas tres personas de las cuatro sospechosas que se dedicaban al robo de relojes de lujo. La víctima sufrió el robo de 400 relojes de la marca Cartier hace dos meses en el barrio San Vicente y la pérdida está valuada en unos 400.000 dólares.

Se trata del robo de una colección privada reportada por una persona que estaba siendo investigada sigilosamente por agentes especializados, que derivó en sendos procedimientos liderados por el comisario Nimio Cardozo.

“Se robaron 400 relojes de alta gama entre Rolex, Cartier, oro y dinero en efectivo. El monto aproximado que estamos manejando es que pudieron totalizar más de 400.000 dólares el total del robo”, explicó en conferencia de prensa el comisario Cardozo.

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Aclaró que por una disposición del comando institucional el Departamento Antisecuestro se encargó de investigar el caso. “En base a todo el trabajo investigativo a hoy tenemos identificadas a cuatro personas a quienes nosotros le vemos como autores materiales del hecho porque en base al análisis del circuito cerrado y el análisis de señales también pudimos identificar a estas personas”, acotó.

Atracadores se reunieron en la propia casa de la víctima

El jefe policial detalló que se comprobó que hubo una reunión previa entre los integrantes de la banda antes de perpetrar el hecho, en el mismo sitio donde se produciría el asalto y posterior al hecho volvieron a reunirse en la zona de Luque.

“La operación Cartier se está haciendo con tres allanamientos simultáneos de los cuales tenemos cuatro objetivos y de los cuales tenemos tres detenidos. Una persona que debía guardar arresto domiciliario en la casa donde se allanó, no estaba porque estaba también vinculada a otro hecho punible que tenía otra casa como arresto domiciliario”, señaló.

El comisario Cardozo manifestó que la detención se produjo a dos meses de la denuncia del hecho y los investigadores eran conscientes de que ya no hallarían las evidencias por su alto valor comercial. “Una vez que terminemos esta fase de la operación vamos a proceder a hacer todo lo que sea el análisis de la extracción forense de las pericias para poder escalar al nivel superior de quién pudo haber sido el mandante y quién pudo haber sido quien redujo los objetos robados”, mencionó.

El megarobo se concretó en una vivienda particular . “Según manifestación del hijo de la víctima y dueño de la casa cuando entraron estas personas entraron con inhibidores. Vamos a compartir con ustedes el circuito cerrado de la casa. Y cuando ingresan, primero van al lugar donde ya sabían que estaban guardados los objetos de valor y sabían a qué iban”, remarcó.

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