Pedro Juan Caballero (Emerson Dutra, corresponsal)
En un confuso episodio, un albañil fue asesinado con varios disparos de arma de fuego en el rostro por parte de un hombre desconocido. El sangriento suceso ocurrió a las 12:30 aproximadamente de este martes, en el interior de una vivienda ubicada en el barrio General Díaz de la capital departamental, a metros del cementerio San Carlos.
Datos revelan que Daniel Espínola Sanabria (37) se encontraba descansando en el interior de la casa cuando ingresó al terreno una persona desconocida, con casco y arma de fuego en manos, disparando contra la humanidad del trabajador.
“Estaba sentado en un sillón cuando ingresó el autor del hecho. Directamente le disparó. Los proyectiles, según se puede observar, dieron todos en su rostro”, señaló el comisario César González.
Lea más: Internos del Cereso sufrieron lesiones en las manos
Los primeros datos revelan que tanto la pareja de Espínola Sanabria, como sus hijos menores de edad, vieron atónitos el frío accionar del presunto sicario.
Tras cometer la ejecución, el autor de los disparos abandonó raudamente el lugar a bordo de una motocicleta de la marca Honda, color rojo y sin chapa. “El marginal utilizó una pistola calibre 9 milímetros para cometer la ejecución”, señaló el uniformado.
Hasta el momento, los investigadores policiales no cuentan con informaciones de cuál sería el móvil del crimen. Daniel, según los datos, no posee antecedentes policiales.
Te puede interesar: Balearon a un docente por defender a su familia ante un asalto domiciliario
Dejanos tu comentario
Hace 7 años se condenaba el escalofriante primer crimen por placer
El 18 de setiembre de 2017, hace siete años, se dictó una sentencia condenatoria que marcó un hito en la historia criminal en Paraguay: la pareja Isaías Raúl Torres y Gissella Eliana Milea Otto fue condenada a 40 años de cárcel luego de ser encontrados culpables de asesinar al locutor radial Agustín Emmanuel Bogado Quintana, de 32 años, por el “mero placer de matar”. El crimen ocurrió el 8 de febrero del 2014.
La presidenta del tribunal de sentencia, la magistrada Mesalina Fernández, fue quien observó que este fue el primer caso de crimen por placer que recibía una condena en el país. Con Fernández, Gloria Hermosa y Alba González integraron el tribunal que juzgó y condenó a los acusados (quienes entonces tenían 27 años de edad) a 30 años de cárcel, más 10 años de medidas de seguridad, totalizando así 40 años de pena privativa de libertad.
Según los elementos debatidos durante el desarrollo del juicio oral y público, Torres (de nacionalidad argentina) y Otto, desde 2013, ofrecían favores sexuales a través de un perfil falso en redes sociales para elegir a su potencial víctima, y fue así como la mujer sedujo al radialista, entre 37 “candidatos”; mientras que, a través de los mensajes de texto enviados entre ambos, se pudo conocer cómo planearon el crimen y que el móvil fue simplemente asesinar por placer. El Ministerio Público recuperó unos 4.000 mensajes como prueba contundente del crimen planificado y ejecutado con saña y alevosía.
El crimen
En la madrugada del 8 de febrero de 2014, Agustín Bogado jamás se hubiera imaginado que iba a convertirse en la víctima del perverso plan, cuando los condenados llegaron a su casa ubicada en el barrio San Cristóbal de Asunción. Tras ingresar Gissella Otto al domicilio y distraer al radialista, mientras Isaías Torres permanecía oculto, éste también entró a la vivienda y golpeó a la víctima en la cabeza con una manopla de hierro, con la ayuda de Milén Otto.
Bogado agonizó en el piso, mientras se desangraba, sin posibilidad de recibir ayuda de nadie, y falleció a consecuencia de un politraumatismo craneoencefálico. Luego de concretar el crimen, los asesinos fueron a un motel para “festejar” lo que habían hecho y, días después, siguieron compartiendo sobre el “placer” que les producía el horrendo acto, según los mensajes de texto que se probaron en el juicio.
A partir del rastreo de mensajes y llamadas de la línea telefónica de la víctima, el formoseño Torres fue detenido el 2 de abril del 2014 en su casa en Limpio, donde la Fiscalía encontró el teléfono de la víctima y la manopla de hierro con la cual se cometió el crimen. Pasarían cuatro meses para la captura de la Gissella, el 14 de agosto del mismo año, en su casa en la ciudad de Atyrá (Cordillera), donde vivía con sus padres. Las crónicas judiciales mencionan que la madre de Agustín tuvo la valentía de encarar al asesino para que le revelara quién fue su cómplice y en ese encuentro le dio el nombre de su pareja.
Mensajes de texto
Tanto Torres como Otto intercambiaron mensajes de texto donde afirmaban que “disfrutaron al matarlo” y cómo Agustín suplicó por su vida, por lo que ya planeaban volver a matar. También acordaron elegir mejor a la víctima, que tuviera un mayor caudal económico. Igualmente Torres escribió que “lo mataría de nuevo porque me encanta matar”, y decía de su pareja “quiero a mi asesina favorita”.
“Sangre. Eso habrá a la próxima”, anunciaba Torres, a lo que Otto le contestó “eso me gustaría mucho. Si pudiera meter 10 personas en un camión y matarlas el mismo día sería lo máximo”. Asimismo, otros mensajes dados a conocer durante el juicio oral expresaban: “Fue como un juego sexual, pero sin llegar a eso, luego de un brutal asesinato, jaja somos unos demonios...”, “Se supone que después teníamos q sentirnos culpables y estábamos ahí jugando”.
“En las conversaciones que mantuvieron los condenados, vía WhatsApp, ambos referían y hacían alusión directa al crimen cometido. En varias ocasiones dijeron que esa circunstancia les produjo placer, gusto y felicidad. Manifestaron la intención de cometer otros crímenes haciendo hincapié en que las futuras víctimas tenían que poseer mayores recursos económicos”, expresó la fiscal Carla Rojas, que representó al Ministerio Público en el caso, tras lograr la sentencia máxima para los asesinos.
Entre las pruebas también hubo testificales de la hermana y de la vecina de la víctima, que demostraron que Agustín era una persona muy querida y que no tenía enemigos. Otro vecino declaró que en el momento en que ocurrió el hecho pudo escuchar ruidos como de un animal sufriendo. Bogado Quintana fue encontrado sin vida esa misma mañana del 8 de febrero del 2014 por su hermana menor, con vivía y que volvía de un viaje de fin de semana.
“Necesidad de gratificación”
“Al momento del examen médico forense, se encuentra en posesión de sus facultades mentales y en condición de discernir la naturaleza de sus actos y las consecuencias de los mismos”, habían coincidido los estudios psiquiátricos forenses practicados a Isaías Torres y Gissella Otto. En otro informe a cargo de la licenciada Florentina Ramírez, psicóloga forense, sobre el área afectiva y emocional de Gisella Milea, la conclusión era concreta; la joven no presenta trastorno mental, ni de personalidad, pero sí denota una necesidad de gratificación inmediata.
En parte del documento de la licenciada Ramírez, se lee “carece de afecto. También ella es una persona que no se ha sentido amada, por lo que le cuesta dar afecto. (..) Poca capacidad de frustración y necesidad de gratificación con tendencia al abuso de sustancias” resalta la profesional. En noviembre del 2018, Gissella Eliana Milea Otto se quitó la vida en el interior de la cárcel del Buen Pastor, en Asunción.
La licenciada Graciela Zelada de Rodriguez, sicóloga forense del Poder Judicial, tuvo a su cargo el informe sobre Isaias Raúl Torres, en que concluía que el joven no presentaba ningún tipo de trastorno mental, ni de alteraciones en la conciencia ni retraso mental. A su vez, la psiquiatra forense Adelaida Núñez informó sobre la situación síquica de Torres: “Se encuentra vigil, orientado en tiempo y espacio. Con memoria conservada. Colaborador con la entrevista”. Con estos hechos, la historia criminal registró este escalofriante caso, a través de una eficiente investigación que logró una condena ejemplar.
Dejanos tu comentario
Hallan muerta a una mujer en su vivienda y sospechan de un nuevo caso de feminicidio
Pedro Juan Caballero (Emerson Dutra, corresponsal)
Desde dependencias de la Policía Nacional de la jurisdicción de Pedro Juan Caballero, en el departamento de Amambay, informaron sobre el hallazgo de un cadáver dentro de una vivienda. Según los investigadores, la víctima sería una mujer identificada como Leónida Domínguez de Arce, de 63 años de edad. La mujer fue hallada muerta en el interior de su residencia, ubicada en el barrio Virgen de Caacupé de la capital departamental.
Según consta en el informe policial, el pasado domingo la sexagenaria y su marido, Crescencio Arce López (73), mantuvieron una acalorada discusión por problemas de índole particular.
Según refieren los testigos, que la pelea llegó a un nivel muy denso, al punto que obligó a familiares de la mujer a sacarla de la casa. Sin embargo, en horas de la noche Leónida, y ante su insistencia, regresó a la vivienda en compañía de sus parientes, quienes quedaron con ella hasta las 23:00, aproximadamente.
Sorpresa
Todo hacía suponer que el mal momento había quedado atrás, sin embargo esta mañana se constató que no fue así luego de que se descubriera el dantesco desenlace: la mujer fue encontrada muerta en medio de un charco de sangre. Fue asesinada con golpes de un arma punzante que le destrozó la cabeza y el rostro. Su marido, y principal sospechoso del crimen, desapareció del lugar.
“Encontramos un cortahierros con sangre. Sospechamos que fue utilizado para ejecutar a la mujer”, explicó el comisario César González, jefe de Prevención y Seguridad ciudadana.
Dejanos tu comentario
Fiscales de Paraguay y Colombia definen hoja de ruta para seguir investigando asesinato de Pecci
Bajo la coordinación del fiscal de Asuntos Internacionales Manuel Doldán Breuer y su colega de Colombia, Adriana Mercado, se reunieron por medio virtual los equipos técnicos y equipos fiscales de Paraguay y Colombia para definir la hoja de ruta y la programación de las negociaciones operativas vinculadas al Equipo Conjunto de Investigación (ECI) del crimen del ex fiscal Marcelo Daniel Pecci Albertini.
La reunión técnica surge como derivación de la reunión entre los fiscales generales de Paraguay y Colombia, desarrollada (por medios virtuales) el pasado martes 10 de setiembre, oportunidad en la que los titulares de ambos entes definieron las prioridades investigativas e instruyeron a sus fiscales la decisión de avanzar en la creación del ECI.
Te puede interesar: Expulsan a brasileño condenado a 26 años de prisión, por robos agravados
Los técnicos y los fiscales de ambas instituciones intercambiaron informaciones y consultas sobre cada una de las cláusulas del instrumento de cooperación técnica del ECI, y acordaron los términos preliminares y las pautas de funcionamiento del Equipo Conjunto. Además, acordaron la metodología de trabajo, la agenda programática y otros detalles vinculantes para el cierre del acuerdo internacional.
La próxima reunión técnica operativa fue fijada para el próximo viernes 20 de septiembre, en donde ya podrán definir las pautas finales para la firma bilateral del ECI.
Podes leer: Un hombre irrumpió en Interpol e intentó acuchillar al policía de guardia
Dejanos tu comentario
Expulsan a miembro del PCC detenido en Amambay y que era requerido por justicia brasileña
Este jueves, la Policía Nacional concretó la expulsión de un ciudadano brasileño que contaba con mandato de prisión en su país. Este hombre fue detenido en Pedro Juan Caballero, departamento de Amambay, y sería miembro del grupo criminal denominado Primer Comando Capital (PCC).
Se trata de William Pereira Soares, de 37 años, quien estaba refugiado en una vivienda en la citada ciudad y que fue allanada ayer miércoles. Este hombre fue detenido en Brasil, pero se habría fugado mientras estaba internado en un hospital del estado de Paraná y huyó hacia PJC.
El detenido cuenta con un frondoso prontuario en el vecino país, entre ellos por homicidio, tráfico de droga, tenencia ilícita de arma de fuego, amenazas, asociación criminal, daños, robo, alteración de marca de identificación de vehículos, lesiones y entrada de aparatos celulares a prisión.
Podés Leer: Detienen a una mujer que intentó ingresar con un arma en el penal de Encarnación
“William Pereira Soares, de 35 años, cuenta con mandato de prisión pendiente en su país de origen e infracción a la ley migratoria. La expulsión fue realizada a través de la Dirección Nacional de Migraciones, siendo entregado a la Policía Militar de Brasil, dentro del marco del acuerdo de cooperación internacional”, confirmaron desde la Policía Nacional.
El procedimiento de expulsión fue desarrollado por personal del departamento Contra el Crimen Organizado Regional de Pedro Juan Caballero, así como también del Grupo Especial de Operaciones (GEO) y Grupo Táctico Lobo. El hombre fue detenido ayer miércoles en una lujosa vivienda ubicada sobre las calles Ramón Gill Sánchez y Pablino Cristaldo.
Lea También: Detienen a joven que intentó asaltar local de cobranzas en Asunción