Ciudad del Este. Agencia Regional.
Como de posible catalepsia es considerado el caso de una beba dada por muerta tras un nacimiento prematuro y luego con signos de vida. La niña nació sin vida en el Hospital Regional de Ciudad del Este, según la confirmación médica, y fue entregada a su familia para su entierro. Dos horas después fue constatada que seguía con vida, ya dentro del cajoncito, en su casa, donde su familia realizaba el velatorio.
Se trata de una niña de tan solo 400 gramos, quien nació prematura. Al “revivir” fue llevada de nuevo, en su pequeño ataúd, al mismo hospital donde se confirmó que seguía con signos vitales y fue derivada a cuidados intensivos del Sanatorio Le Blanc, de Ciudad del Este.
La familia considera que “no hay otra explicación posible, es un milagro de Dios”, de acuerdo al relato de Zunilda Medina, familiar de la pequeña, según el sitio CDE HOT de Ciudad del Este. La mujer contó que procedieron a destapar el pequeño ataúd para que una catequista “bendiga con agua de socorro a la beba antes de su entierro” y fue en ese momento que otro familiar se percató que la niña seguía viva.
Ocurrió el viernes 12 de abril al mediodía y tras los trámites de rigor llegó a la casa del km 14 de Minga Guazú, a las 14:30, donde minutos después se dieron cuenta que la beba seguía respirando y volvieron al hospital con la niña en el cajoncito destapado.
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El director del hospital, doctor Federico Schroder, explicó que pudo haberse tratado de un estado de catalepsia, pero que se cumplió con el protocolo legal para confirmar un deceso. “La catalepsia es un estado consciente donde no tiene signos vitales, biológicamente el paciente está muerto, no respira, no tiene frecuencia cardiaca y con rigidez cadavérica. Ya tuvimos otros casos similares”, indicó. Asimismo, mencionó que ya se comunicó con otros profesionales para poner a cargo de la comunidad científica un caso así.
La madre de la beba se encuentra internada todavía en el hospital regional. La misma había sido remitida con código rojo desde el Hospital Los Ángeles y se procedió a la cesárea por el estado en que se encontraba la madre y también la niña, aún con siete meses de gestación.
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