En la playa del barrio San Antonio de Pilar (Ñeembucú) se registraron ayer domingo presuntos ataques de pirañas a los bañistas, que presentaron heridas en los dedos, manos y pies, por lo que fueron trasladados al hospital local. Según informes preliminares, al menos siete personas fueron afectadas, aunque no fue verificada la especie que produjo el ataque.
Se especula que un cardumen de palometas (pirañas de tamaño menor) pudieron haber atacado a los bañistas durante la calurosa jornada de ayer. De acuerdo a expertos en fauna ictícola, las palometas normalmente son inofensivas, pero se vuelven agresivas, como consecuencia de las aguas cálidas, fenómeno que se incrementa como efecto de El Niño.
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La extinción progresiva de sus depredadores naturales (yacarés, nutrias y especies similares) hace que las palometas se multipliquen con más rapidez, empujando a cardúmenes a extenderse hacia aguas bajas, como la que caracteriza a la zona pilarense. En nuestro país existen tres especies de pirañas, esta generalmente se reproduce desde octubre hasta marzo, en coincidencia con el inicio de la temporada de calor.
Hace un año, en enero de 2023, en el complejo turístico de Laguna Blanca, en el departamento de San Pedro se registraron ataques de pirañas con seis víctimas. En dicha temporada también hubo dos casos, en el departamento de San Pedro y en Itá Enramada (Asunción), de personas que habían fallecido ahogadas y sus cuerpos fueron recuperados con mordeduras de estos peces que, por su periodo de reproducción, se tornan agresivas.
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