Una obra encarada por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) sobre la ruta PY02, en la zona del autódromo Aratiri, en Capiatá, genera quejas de los conductores a causa del atascamiento vehicular que allí se genera. El jefe del departamento de Proyectos Viales, ingeniero Javier Recalde defendió la utilidad que tendrán las mejoras incorporadas una vez que concluyan los trabajos en el lugar.

Los obreros iniciaron hace una semana el desmontado del separador del sentido de la citada ruta internacional y habilitar un giro a la izquierda. Todo el perímetro de intervención cuenta con señalización adecuada. Además, agentes de la Patrulla Caminera y de la Policía Municipal de Tránsito (PMT) colaboran a diario con el despeje rápido en el citado tramo.

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Un equipo periodístico del canal GEN/Nación Media, visitó el sitio de obras a fin de verificar los reclamos, en tanto -de manera simultánea-, desde los estudios los conductores del programa “Dos en la ciudad” contactaron con el ingeniero Javier Recalde, quien fundamentó los motivos de la intervención del MOPC en dicha zona.

“Al respecto, lo que hizo el área técnica de la Dirección de Vialidad es un estudio de ese cruce, donde hay un semáforo que es el ingreso principal y la salida de la zona del autódromo Aratiri. Es un cruce bastante complicado, entonces, lo que se hizo fue un análisis de optimización de los tiempos semafóricos y se analizó la posibilidad de una dársena de espera para vehículos que puedan girar a la izquierda que antes no estaba permitido”, explicó.

Afirmó que lejos de perjudicar, se logró “optimizar los tiempos semafóricos”. Especificó que se va a contar con una dársena de espera central en el eje de la calzada hacia el lado norte “para los vehículos que esperan para girar a la izquierda”, de tal forma a no interrumpir las dos calzadas disponibles para los vehículos que circulan de este a oeste.

Consultado si el proyecto responde a una requisitoria comercial, el ingeniero Recalde respondió: “se hace una optimización en base a situaciones, de hecho los comercios al establecerse ya generan un conflicto de tráfico porque lastimosamente estos comercios que están surgiendo por todos lados tienen el permiso municipal de construcción y tienen una licencia ambiental”.

No obstante, el ingeniero Recalde lamentó que los permisos municipales se otorguen “sin un estudio de impacto vial”, que podría generar inconvenientes para los conductores de las rutas internacionales.

“Entonces, se establecen estos grandes negocios sin esos estudios y ahí se generan estos problemas. Se genera un punto de conflicto desde el punto de vista técnico en el estudio de tránsito cuando vehículos desean acceder y girar en determinadas direcciones y no hay ningún tipo de opciones claras ni seguras ni señalizadas. Esa es la situación”, significó.

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