El operativo Dakovo, lanzado este martes en Paraguay, Brasil y Estados Unidos, ubicó como su principal objetivo al empresario argentino Diego Hernán Dirísio, instalado en territorio paraguayo, como el presunto “mayor contrabandista de armas de Sudamérica”, al develar que sus negocios movilizaron 43.000 armas en los últimos tres años, por valor de 240 millones de dólares, para facciones criminales brasileñas como el Primer Comando Capital (PCC) y Comando Vermelho.
Tras la serie de allanamientos, Dirísio está prófugo junto a su pareja, la exmodelo paraguaya Julieta Nardi, también buscada en esta causa. Según una publicación periodística realizada por el medio de comunicación brasileño Globo, el argentino se dedicaba a la comercialización de armas mediante su empresa International Auto Supply (IAS), asentada en Asunción, la capital paraguaya.
“Él es el dueño de la empresa, quien coordina todas las acciones de la empresa, hizo gestiones directas para la venta y reventa sabiendo que esas armas debían ser desguazadas y destinadas al crimen organizado. Eso quedó demostrado en la investigación y esta fue la mayor dificultad para iniciar la operación”, afirmó el superintendente de la Policía Federal, Flávio Albergaria, a la publicación brasileña.
Los investigadores comprobaron que el empresario argentino compró miles de pistolas, rifles, ametralladoras y municiones de diversos fabricantes europeos (Croacia, Turquía, República Checa, Eslovenia).
Mediante un esquema que involucró a cambistas y empresas fantasmas en Paraguay y Miami, Estados Unidos, la empresa IAS, propiedad de Dirísio, revendió los arsenales a las mayores facciones brasileñas, principalmente en Río de Janeiro y São Paulo. Detalla que el operativo fue realizado por la Policía Federal de Bahía, en alianza con el Ministerio Público Federal, la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y el Ministerio Público del Paraguay.
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Lista roja de Interpol
Globo también menciona que la Justicia de Bahía, que dirige el operativo, determinó que los objetivos de detención que se encuentran en el exterior sean incluidos en la lista roja de Interpol y que, si son detenidos, serán extraditados a Brasil.
Asimismo, refiere que la operación Dokovo, en el transcurso de este martes, allanó el domicilio del argentino, en Asunción, pero no lo encontró. Añade que la investigación comenzó en 2020, cuando se incautaron pistolas y municiones en el municipio brasileño Vitória da Conquista, en el suroeste de Bahía. En Paraguay, los allanamientos fueron encabezados por agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y del Ministerio Público.
Por otra parte el medio de comunicación indica que a las armas se les quitó el número de serie, pero, a través del examen forense, la PF logró obtener la información y avanzar en la investigación. Durante este período, se realizaron 67 incautaciones, totalizando 659 armas incautadas en Rio Grande do Sul, Santa Catarina, Paraná, Mato Grosso do Sul, São Paulo, Rio de Janeiro, Minas Gerais, Espírito Santo, Bahía y Ceará.
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El proceso se encuentra en curso en el Segundo Juzgado Federal de Salvador, que emitió 25 órdenes de detención preventiva, seis órdenes de detención temporal y 54 órdenes de allanamiento e incautación en tres países: Brasil, Paraguay y Estados Unidos.
En Brasil, las órdenes de allanamiento fueron cumplidas en Río de Janeiro, São Paulo, Sorocaba, Praia Grande, São Bernardo do Campo, Ponta Grossa, Foz do Iguaçu, Brasilia y Belo Horizonte. De acuerdo a las informaciones proveídas por la Policía Federal entre noviembre de 2019 y mayo de 2022, la firma de Dirísio importó 7.720 pistolas de un fabricante de Croacia, donde se ubica una ciudad llamada Dokovo, que da nombre a este operativo.
Las investigaciones también apunta a la adquisición y venta de 2.056 fusiles fabricados en la República Checa y más de cinco mil fusiles, pistolas y revólveres de fabricantes turcos. También se importaron al menos 1.200 pistolas de una fábrica en Eslovenia: un total de 16.669 armas.