Este miércoles, el grupo de abogados que representa a la señora Gisele Zuni Mousques denunció que su clienta está siendo víctima de violencia psicológica, telemática y contra su dignidad por parte de Christian Chena y su conglomerado de medios. Explicaron que se está desacatando una orden judicial y que esta persecución se intensificó porque Mousques había ganado una demanda laboral por 2.000 millones de guaraníes.
Según la abogada Lucía Sandoval, presentaron la denuncia ante el Juzgado de Trinidad y solicitaron una medida cautelar contra el empresario Christian Chena, porque tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia contra Teledifusora Paraguaya S.A. Gisele Mousques comenzó a ser atacada en su dignidad.
“Ella (Gisele) sistemáticamente viene recibiendo ataques en su dignidad de mujer y lo que se está haciendo ahora es desacatar la orden judicial, pero queremos aclarar que respetamos la libertad de expresión y de prensa, así también el derecho a la intimidad y dignidad de las personas, y que no hay abuso de la Ley”, expresó la Sandoval en entrevista con La Nación/Nación Media.
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Resaltó que se denunció al empresario Christian Chena por Violencia Contra la Mujer según la Ley 5777/16, por lo que la jueza Gloria Machuca dispuso una medida de protección para que el hombre no pueda hacer publicaciones o referirse a Mousques en sus redes sociales, medios digitales y otros similares que sean de su propiedad, sea de manera directa o indirecta.
“Pero al recibir la notificación lo primero que hace es poner la cédula de notificación en su red social haciendo caso omiso al mandato judicial e instalando la idea de que se trata de una censura previa. Lo que queremos aclarar de que eso no es así, lo único que solicitamos es que pare el hostigamiento, porque tras esa publicación se genera una horda de comentarios de odio, peyorativos y discriminatorios en su condición de mujer”, refirió.
Explicó que estas publicaciones hacen mucho daño a la señora Gisele que es esposa, madre, abuela y profesa una religión. “Por lo que cada vez que reflota una información que ya data de hace mucho año y que ya no es de utilidad pública, por eso decimos que no hay censura previa. Entonces lo hacen apropósito y genera comentarios que hacen daños a la persona que debe recurrir a profesionales”, confirmó.
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