Un joven paraguayo que desde hace un año estaba haciendo un voluntariado en Israel contó por todo lo que pasó para volver al país. Destacó el acompañamiento de las autoridades paraguayas para que su retorno sea seguro y que pueda reencontrarse con sus familiares, que estaban muy angustiados por los enfrentamientos que se registran en medio oriente.
Se trata de Javier Poggi que estaba como voluntario en la ciudad de Acre, desde enero del 2022 y le faltaban ocho meses para culminar el trabajo que estaba realizando en ese país, pero tomó la decisión de volver porque sus padres y familiares estaban muy preocupados atendiendo a los conflictos que se desarrollan en la zona.
“La ciudad de Acre donde estaba residiendo en el norte el país está bastante alejada de la zona de conflicto que es en Franja de Gaza, son como seis horas de viaje en auto. La vida donde estaba era muy tranquila, todo transcurría con normalidad, pero tomé la decisión de regresar por mi familia y para evitar más preocupaciones para ellos”, detalló el joven en entrevista con La Nación/Nación Media.
Explicó que el vuelo en el que regresó era el único paraguayo entre más de 100 ecuatorianos y que de Tel Aviv salieron en un vuelo comercial chárter hasta Madrid, España. “Estoy muy agradecido con el director de la Secretaría Nacional de Repatriados, Guillermo Osorio, porque estuvo en contacto conmigo desde el vamos y también con Lucas Franco que es el encargado de Negocios en Israel quien me acompañó en todo momento”, manifestó.
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De Tel Aviv a Madrid
Javier explicó que fueron casi dos días (48 horas) de odisea por la que pasó para poder reencontrarse con su familia. “Yo salí de Haipa, cerca de las 10:00 de la mañana del domingo 15 de octubre y tomé el tren para llegar al aeropuerto en Tel Aviv pasado el mediodía para tomar el vuelo humanitario, que fue organizado por el gobierno de Ecuador. Todo ese tiempo estuve acompañado por Lucas Franco encargado de negocios del Paraguay”, expresó en LN.
Agregó que tomó el vuelo pasada las 19:00, luego llegó hasta el aeropuerto de Madrid donde tuvieron varios contratiempos, porque no descendieron del avión por tratarse de un vuelo humanitario. “En cuatro horas llegamos a Madrid y teníamos planeado una escala de 1:50, para hacer carga de combustible y cambio de tripulación. Ese tiempo de escala se extendió a 3:40, dentro del avión, que es un mecanismo de repatriación”, señaló.
De Madrid a Ecuador
Tras los inconvenientes en Europa, el vuelo salió para Quito, Ecuador, se tenía planeado un viaje de unas once horas, pero que se fueron más trece. “El vuelo se retrasó por los sistemas de tormentas por el que atravesamos. Los pilotos tuvieron que realizar muchas maniobras para salvaguardar la integridad de la aeronave y la de los pasajeros. Llegamos a salvo a Quito”, apuntó en nuestro medio.
Manifestó que por más de 22 horas estuvo sin conexión a internet y que al llegar a Ecuador pudo conectarse con sus familiares como autoridades que lo acompañaron. “Lucas Franco me había enviado un video en el que me dice que cinco minutos después de que despegamos sonaron las alarmas advirtiendo sobre los ataques y despegamos con la justa ante de que la siguiente ola de ataque llegue a Tel Aviv. Fue algo casi milagroso”, confirmó.
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De Perú a Paraguay
El joven refirió que en Quito lo esperaba el embajador de Paraguay José Emilio Gorostiaga y la cónsul Anahí Armele, quienes se encargaron que todo el proceso en el aeropuerto sea corto, así también, lo trasladaron hasta un hotel donde pudo descansar. “Ellos previeron que debía quedarme unos días en Ecuador, pero desde la oficina de repatriados me llegaron los pasajes del vuelo que me llevaría hasta Paraguay para esa misma noche”, puntualizó.
Confirmó que llegada la noche tomó el vuelo que lo llevó a Lima, Perú, donde fue recibido por el cónsul paraguayo, Julio Centurión, que hizo que todo el proceso dentro del aeropuerto sea rápido. “El cónsul me acompañó hasta que abordé el vuelo con destino a Paraguay. Llegué al país en la mañana del martes, donde fui recibido por mis familiares y la señora Nancy Villamayor de la Secretaria de Repatriados”, concluyó. Javier ahora está recomenzando su vida en el país.