Tras un arduo trabajo de investigación y ubicación de agentes de Investigación Sensible de la Policía Federal de Brasil y de agentes especiales de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) se logró dar con el paradero de Marcos Roberto Ribeiro, quien se encontraba prófugo de la justicia del vecino país desde hacía ya 10 años. El mismo fue expulsado de Paraguay y entregado a las autoridades brasileñas.

Ribeiro era buscado por narcotráfico internacional y contaba con dos órdenes de prisión emanadas por la justicia federal y estatal de Mato Groso do Sul, que están pendientes con las sentencias ya libradas, que totalizan 22 años de cárcel.

Finalmente, en la noche de este domingo, se produjo la captura de Ribeiro en el estacionamiento de un conocido centro comercial ubicado en el centro de Pedro Juan Caballero, Amambay, donde el hombre, al percatarse de la cantidad de agentes a su alrededor, decidió descender de su vehículo y no ofreció resistencia alguna al arresto. Luego fue puesto a disposición del Ministerio Público.

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El exitoso procedimiento se basó principalmente en el intercambio de información entre ambos equipos de trabajo, que venían realizando un seguimiento del sujeto, ya que las autoridades brasileñas tenían conocimiento de que se encontraba en Paraguay.

No llegaban a dar con la ubicación exacta del mismo, teniendo en cuenta que se hacía pasar por comerciante, revelaron los investigadores y agregaron que este tipo de colaboración, de inteligencia entre ambos países, está enmarcada en la lucha común contra el narcotráfico.

Las fuerzas del orden buscan generar una red de intercambio de informaciones y apoyo para ejecutar tareas en casos específicos que puedan ayudar a anular la expansión del narco en zonas de frontera.

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