Campeonato de albañiles: Alejandro Espínola reaviva la esperanza de construir su propia casa
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Don Alejandro Espínola llegó desde Benjamín Aceval, departamento de Presidente Hayes, hasta el primer Campeonato Nacional de Albañiles, que se inició este sábado, lleno de expectativas y con la esperanza de que su cuadrilla sea la ganadora. Pero su sorpresa fue aún más grande cuando en uno de los primeros sorteos de premio-incentivo, escuchó su nombre como uno de los ganadores de las 10 bolsas de cementos Cecon, al punto que no pudo contener las lágrimas.
Este momento tan emotivo estuvo marcado por declaraciones aún más fuertes, “Dios me escuchó porque necesitaba para mi casa”, dijo en conversación con La Nación/Nación Media. El propio don Alejandro explicó que a pesar de que lleva más de cuatro décadas dedicándose a la construcción, no ha logrado aún llegar a concretar su gran sueño, que es la de contar con una casa propia, hecha de material cocido.
“Mi casa está hecha de una manera muy antigua, que es de palma, se utiliza el tronco de la palma y se parte para ir formando la estructura de las paredes, el techo si ya es de chapa, y mi idea ahora con este premio es poder hacer mi casita ya de material, de hecho, venimos todos con el objetivo de llevarnos el premio mayor y yo lo utilizaría para mi casa, como no y con esto que gané también ahora tengo más esperanzas”, relató don Espínola.
En otro momento de la entrevista con La Nación/Nació Media, don Espínola, de 66 años, manifestó que se encontraba muy orgulloso de su profesión y estaba feliz de que se realicen este tipo de eventos y más aun que pueda participar del mismo con quien fue su mentor en la profesión, el señor Julio Núñez, quien se encargó de la inscripción del grupo. Remarcó que gracias a su profesión ha logrado sacara adelante a nueve hijos de una manera honesta y que ha vivido muchas alegrías, como la que hacía horas durante el sorteo que le acercaba más a cumplir su sueño de construir su propia casa de material cocido.
En cuanto a la profesión de albañil y dedicarse al rubro de la construcción, en el mensaje que este experimentado obrero dejó para las siguientes generaciones y los jóvenes en general, destacó que lo más importante es tener la oportunidad de ganarse la vida de manera digna y honrada, y que gracias al rubro de la construcción se puede llegar de traer mucho progreso a las familias paraguayas, en especial a la de los obreros.
El sector de la construcción de las viviendas se había concentrado en satisfacer la demanda del estrato alto social, pero hoy en día esas necesidades habitacionales están prácticamente cubiertas y su crecimiento ya es vegetativo, contó el arquitecto Aldo Cristaldo Kegler, Foto: Gentileza
Industrializar y formalizar la construcción mejorarán el acceso a la vivienda, dice arquitecto
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Industrializar el rubro de la construcción de viviendas y mejorar su eficiencia, como también calificar y formalizar la mano de obra, son desafíos claves del sector para ofrecer soluciones habitacionales más accesibles a la clase media y baja, que representan la mayor parte de la demanda insatisfecha en Paraguay. Así lo destacó el arquitecto Aldo Cristaldo, referente del desarrollo inmobiliario, quien también subrayó la importancia del acompañamiento estatal junto a políticas públicas efectivas de la vivienda.
El sector de la construcción de las viviendas se había concentrado en satisfacer la demanda del estrato alto social, pero hoy en día esas necesidades habitacionales están prácticamente cubiertas y su crecimiento ya es vegetativo, contó el arquitecto Aldo Cristaldo Kegler, director de una desarrolladora inmobiliaria y referente del sector. Explicó que, en contraste, los esfuerzos de los privados se empezaron a enfocar en los estratos de la clase media, que hoy en día representan alrededor del 80% de la demanda.
“Todavía no hemos logrado dar satisfacción, un buen producto a un buen precio, para la demanda de los estratos medio y bajos (...) Hoy estamos abocados en tratar de optimizar al máximo los procesos constructivos de manera a que el precio final realmente esté a la altura de la posibilidad de una clase media-baja y sin afectar eso a la calidad del producto”, detalló el arquitecto.
En el mes de la industria nacional, Cristaldo Kegler destaca la necesidad de industrializar el sector de la construcción de la vivienda. Sostuvo que bien se habla de una “industria de la construcción”, muchos de los procesos en el sector aún son artesanales y los principales desafíos que enfrenta actualmente la construcción de viviendas en nuestro país están en la industrialización y en mejorar la mano de obra.
“El proceso artesanal tiene problemas de eficiencia, problemas de tiempo, problemas de poder garantizar un producto final, porque está muy basado en la mano de obra no especializada. Entonces el desafío más grande está en industrializar al máximo todos los procesos para que estos procesos puedan ser totalmente medibles, computables, trazables. Y con eso logramos un producto de mejor calidad en menores tiempos a menores costos y más accesible al nivel medio-bajo”, indicó Aldo Cristaldo.
Agregó que en el proceso de industrialización se deben incorporar tecnologías constructivas que permitan la densificación del suelo urbano, es decir, la construcción de edificios de mayor altura o mayor capacidad en lugar de casas unifamiliares, especialmente en ciudades como Asunción, donde el espacio es limitado.
Según explicó, optimizar el uso de este terreno contribuiría a hacer más económicos los servicios y reducir los desplazamientos, promoviendo así ciudades más ecológicas, sustentables y también económicas, dando oportunidad a las familias de menor poder adquisitivo.
“Soy un convencido de que hay que industrializan al máximo la construcción. El obrero no tiene que ir más a trabajar en condiciones paupérrimas, sino que tiene que ir a una industria de la construcción real. Donde puede dejar su moto en un estacionamiento, donde tenga un vestidor, un comedor, donde realmente trabaje en horarios normales y pueda gozar de un seguro social (...) Y eso se logra con industrialización y formalizando”, puntualizó.
Aldo Cristaldo recordó que la seguridad del sistema bancario paraguayo, que por un lado evita la formación de burbujas inmobiliarias, también es un obstáculo para los sectores de menores recursos, ya que las exigencias limitan el acceso al crédito de la vivienda para gran parte de la clase media-baja.
“Hoy en Paraguay los créditos están respaldados por garantías reales que superan entre un 300% y 400% el valor del préstamo, no como en otros países como EE.UU. donde los créditos se daban por la fiabilidad del proyecto y no había ninguna garantía real, lo que generalmente provoca las burbujas”.
La rigurosidad financiera deja afuera a las familias que no llegan a cumplir con las múltiples exigencias bancarias. En este sentido, el arquitecto subrayó la necesidad de que el Estado desempeñe un papel más activo en el diseño de políticas públicas, pero sin debilitar la seguridad de la banca.
Valoró el nuevo programa “Che Róga Porã”, impulsado por el gobierno, como un paso en la dirección correcta para mitigar el déficit habitacional. Este programa, con respaldo del Ministerio de Urbanismo, Vivienda y Hábitat (MUVH), busca ofrecer a las familias de clase media acceso más flexible a su primera vivienda. Sin embargo, reconoció que aún existen desafíos en su implementación, particularmente en cuanto a la falta de conocimiento y asesoramiento sobre cómo gestionarlo.
“La curva de aprendizaje está siendo lenta, pero el enfoque es correcto. Es fundamental que se continúe trabajando en conjunto entre el sector privado y el público, porque ninguna de las dos partes por sí solas podrá resolver el déficit habitacional del país”, señaló Cristaldo.
Mayor buque portacontenedores made in Paraguay estará listo antes de fin de año
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A un año de haber comenzado la construcción en Paraguay del mayor buque portacontenedores de la región, denominado Don Toyo, las obras están registrando un 90 % de avance, por lo que se estima que la embarcación estará lista antes de fin de año.
Es lo que mencionó el titular de la Marina Mercante, Patricio Ortega, quien brindó detalles del proceso de una de las obras más grandes en la historia naval, que se está realizando 100 % en el país con profesionales netamente paraguayos, lo cual es un hito histórico.
“Para hacerse una idea, una barcaza del tipo Mississippi que es la usual tiene 60 metros de largo y 10 metros de ancho, mientras que este buque hecho acá es el doble de largo que va transportar casi 1.000 contenedores en su capacidad máxima”, expresó a la 920 AM.
En setiembre de 2023 se realizaba la puesta en quilla (acto formal que da inicio a la construcción de una nave) del buque motor. Foto: Archivo
El más grande de la hidrovía
En cuanto a las características, Ortega precisó que se trata de un buque motor que transportará contenedores de mucha similitud a una balsa flotante, con una dimensión de 120 metros de eslora (largo), 30 metros de manga (ancho) y una altura de casi 7 metros.
Será el mayor portacontenedores de la hidrovía Paraguay-Paraná, cuyo ensamble genera cientos de empleos para los ribereños, abarcando a unas 300 personas. La obra demanda una inversión de más de USD 15 millones, empleando ingeniería, mano de obra y la calidad de la industria paraguaya.
Don Toyo se monta con capacidad para la navegación costera, pudiendo llegar incluso al puerto de Montevideo, además de estar dotado con los más altos estándares de navegación. Es así que la finalidad del buque será para el comercio exterior, tanto para la importación y exportación de contenedores, que para fines de noviembre ya estaría operativa la megaembarcación.
Las grandes obras de infraestructura como los hospitales, puentes, aeropuerto y franjas costeras tienen volúmenes importantes y con montos superiores muy significativos para el desarrollo del país, afirman.FOTO: GENTILEZA
Hace una década, sector de construcción sostiene expansión del 6 % anual
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El sector de la construcción en el país registra un crecimiento sostenido del orden del 6 % anual en los últimos 10 años, hecho que ha aumentado su participación en el producto interno bruto (PIB), explicó a La Nación/Nación Media, Pablo Rivarola, presidente de la Asociación de Profesionales de la Construcción (Aprocons).
Recordó que el boom inmobiliario comenzó a darse entre 2003 al 2016, y que hasta hoy en día sigue con gran dinamismo en Asunción y ciudades aledañas; últimamente acompañado por inversiones importantes en el sector industrial. “Toda la cadena de la construcción ha tenido un crecimiento acompañando desafíos, no solamente en volumen y montos de inversión, sino también en especialización de los profesionales, en desarrollo de tecnologías y materiales, en avances en técnicas y procedimientos de la construcción”, expresó Rivarola a LN.
Acerca de las obras públicas, dijo que es el dinamizador principal de nuestra economía y es el que mayor porcentaje de inversiones otorga por sobre el sector privado. Sostuvo que las grandes obras de infraestructura como los hospitales, puentes, aeropuerto y franjas costeras tienen volúmenes importantes y con montos superiores muy significativos para el desarrollo del país.
“Creo que el sector privado lo que tiene es una cadena más grande, al tener obras más diversas y complejas como las industriales, u obras en altura como las inmobiliarias, tiene también un alcance mayor en cuanto a tecnología, profesionales, entonces es sumamente importante, es también un motor de la economía, y como toda obra civil o industrial tiene un derrame en varias clases generando fuente de trabajo de todos los niveles”, afirmó.
GRADO DE INVERSIÓN
Respecto al grado de inversión que alcanzó Paraguay en julio de este año por parte de la calificadora de riesgos Moody’s, comentó que es uno de los logros más importantes que tiene el país en dos décadas en el marco de políticas económicas, y que requiere un esfuerzo por parte del sector público y privado para satisfacer las demandas que vendrán a partir de este hito.
“Es el comienzo y también implica una gran exigencia para nosotros como paraguayos. En el sector de la construcción lo veníamos analizando y estamos preparados para el desafío, tanto empresas como profesionales. Creemos que el siguiente paso es reforzar la institucionalidad con mayor seguridad jurídica”, aseveró.
Rubro de la construcción mantiene crecimiento del 6 % anual hace una década
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El sector de la construcción en el país registra un crecimiento sostenido del orden del 6 % anual en los últimos 10 años, hecho que ha aumentado su participación en el producto interno bruto (PIB), explicó a La Nación/Nación Media, Pablo Rivarola, presidente de la Asociación de Profesionales de la Construcción (Aprocons).
Recordó que el boom inmobiliario comenzó a darse entre 2003 al 2016, y que hasta hoy en día sigue con gran dinamismo en Asunción y ciudades aledañas; últimamente acompañado por inversiones importantes en el sector industrial.
“Toda la cadena de la construcción ha tenido un crecimiento acompañando desafíos, no solamente en volumen y montos de inversión, sino también en especialización de los profesionales, en desarrollo de tecnologías y materiales, en avances en técnicas y procedimientos de la construcción”, expresó Rivarola a LN.
Acerca de las obras públicas, dijo que es el dinamizador principal de nuestra economía y es el que mayor porcentaje de inversiones otorga, por sobre el sector privado. Sostuvo que las grandes obras de infraestructura como los hospitales, puentes, aeropuerto y franjas costeras, tienen volúmenes importantes y con montos superiores, muy significativas para el desarrollo del país.
“Yo creo que el sector privado lo que tiene es una cadena más grande, al tener obras más diversas y complejas como las industriales, u obras en altura como las inmobiliarias, tiene también un alcance mayor en cuanto a tecnología, profesionales, entonces es sumamente importante, es también un motor de la economía, y como toda obra civil o industrial tiene un derrame en varias clases generando fuente de trabajo de todos los niveles”, afirmó.
Grado de inversión
Respecto al grado de inversión que alcanzó Paraguay en julio de este año, por parte de la calificadora de riesgos Moody’s, comentó que es uno de los logros más importantes que tiene el país en dos décadas en el marco de políticas económicas, y que requiere un esfuerzo por parte del sector público y privado para satisfacer las demandas que vendrán a partir de este hito.
“Es el comienzo, y también implica una gran exigencia para nosotros como paraguayos. En el sector de la construcción lo veníamos analizando y estamos preparados para el desafío, tanto empresas como profesionales. Creemos que el siguiente paso es reforzar la institucionalidad con mayor seguridad jurídica”, aseveró.