El desalojo de una vendedora de yuyos desató una protesta de familiares y vecinos de la afectada, quienes cerraron momentáneamente la avenida Silvio Pettirossi. El director del Mercado 4, Víctor López, confirmó que se llegó a un acuerdo con la propietaria de la casilla que había sido denunciada por falta de limpieza, de donde se extrajo una gran cantidad de basura compacta en el piso.
Sara Thompson es la dueña del puesto ubicado en el Paseo de los Yuyos y ocupaba un extenso espacio, aunque abonaba un monto ínfimo en concepto de canon a la Municipalidad de Asunción. Tras el diálogo se acordó con la mujer adecuar sus instalaciones y, además, aplicar un aumento de tan solo G. 10.000 en el impuesto.
En diálogo con La Nación/Nación Media, López explicó que se está procediendo a la limpieza de todo el sitio porque el 1 de agosto se prevé organizar el Día del carrulim o Pohã ñana ára. “Es el día internacional del remedio yuyo y entonces estamos a full con nuestra actividad que queremos hacer. Y teníamos acá un puesto en la esquina de República Francesa y Pettirossi que era exageradamente feo y sucio”, relató.
Notificaron a la vendedora
Por ese motivo, explicó que se buscó la forma de limpiar el lugar, notificándole primero a la dueña del puesto. Dijo que la mujer alegó que no podía limpiar sola, por lo que pidió ayuda. “Entonces, programamos con ella y ayer se llevó adelante la limpieza. Y se sacó también su estructura. Tenía unas carpas todas sucias y rotas. Y la denuncia que teníamos era justamente la basura que tenía acumulada”, dijo.
El funcionario municipal informó que del lugar se extrajeron tres camiones llenos de basura. Describió que el puesto tenía 60 centímetros de desecho pegado al piso. “Teníamos denuncias de ratas, alacranes, que por los remedios mismos que estaban todos aplastados debajo de repente estaba lleno de alimañas. Se sacó todo eso, se limpió todo”, señaló.
Aclaró que la ordenanza municipal establece un monto de canon a pagar por metro cuadrado. La señora tenía un puesto de 15 metros cuadrados y abonaba el equivalente a un solo puesto (un metro). “Entonces, yo le dije, te voy a achicar tu puesto para mantenerte tu canon porque o si no tenemos que cobrarte más. Y me aceptó”, indicó al mencionar que el ajuste aplicado implicará unos diez mil guaraníes más sobre el monto que la mujer venía abonando por el impuesto municipal.
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