Ciudad del Este. Agencia Regional.
Los casos de violencia contra las mujeres ocupan un buen número de los reportes policiales cotidianos. Al término de cada turno semanal de las unidades fiscales, el promedio de hechos denunciados en Alto Paraná va de diez a veinte por unidad. No obstante, solo el 3 % de los procesos iniciados con las denuncias llegan a juicio oral sin que haya arrepentimiento de la víctima durante la investigación.
Es lo manifestó a La Nación/Nación Media la fiscala Emilce Ovelar, de la Unidad Especializada contra la Violencia Familiar, de Presidente Franco. “Entre el relato inicial, la imputación del victimario, la acusación y luego el juicio, si la víctima se mantiene en su denuncia, es un gran logro para las mujeres y para la violentada porque demuestra que pudo superar una serie de presiones”, analizó la agente fiscal.
Contó que son demasiados juicios en que “las mujeres víctimas se presentaron a cambiar su versión original y a defender incluso a sus agresores, lo que suele dificultar el trabajo del Ministerio Público”. Refirió que se trata de una serie de condicionantes que suelen incidir para ese arrepentimiento de las víctimas.
“Si hay hijos, eso es lo primero que se argumenta porque, generalmente, son ellos mismos los que piden el perdón a sus papás y si hay niños más pequeños, igual es utilizado como causa para el abandono de los procesos”, explicó la fiscala Emilce Ovelar. “Otro gran problema es el entorno que presiona con la excusa de la familia y que pueden arreglarse los problemas en casa sin intervención judicial”, agregó la agente.
En contrapartida, “si existe apoyo familiar a las víctimas, eso es fundamental para mantenerse en el juicio y fue relevante en aquellas causas que configuran el 3 %, sin que haya existido el arrepentimiento”. Finalmente, citó la necesidad económica como otro componente que genera también mucha presión a las víctimas.
Emilce Ovelar contó que cuando la mujer violentada dice en sus declaraciones iniciales, “me mantendré en mi denuncia, iré hasta el final, seré valiente o alguna otra expresión similar”, es un signo de esperanza de que no será un proceso más en que, a mitad de camino, la mujer baja la guardia y ya no le interesa defender su derecho ni la búsqueda de justicia.
Puede interesarle: Un hombre agredió a su pareja y destruyó todo a su paso en casa de Minga Guazú
La agente del Ministerio Público reconoció que los procesos largos y la justicia lenta son también agravantes que colaboran para que las víctimas quieran apartarse de sus denuncias iniciales. “Es un mea culpa que hago al respecto, nuestro sistema judicial no colabora en ese sentido”, remarcó Emilce Ovelar.
Joven fue denunciado por segunda vez por violencia familiar
La intervención de la fiscal Emilce Ovelar sobre la muy baja cantidad de denuncias que llegan hasta el juicio con el mismo relato, tiene que ver con un nuevo hecho de violencia denunciado por una mujer contra su pareja, por segunda vez. La víctima fue agredida, lesionada y con cortes en la cabeza y en el dedo, por parte de su pareja, quien hace un año y seis meses ya fue denunciado por el mismo hecho y por la misma víctima.
Ocurrió el sábado 15 de julio, a las 19:00, en una vivienda del barrio Las Mercedes de Presidente Franco. Fue víctima una mujer cuyo nombre tiene la sigla L.G.L., de 32 años, y el supuesto responsable es su pareja, que tiene las iniciales F.A.G., de 20 años. El supuesto agresor está imputado por violencia familiar y declarado en rebeldía porque ya huyó de la casa cuando la policía llegó.
Puede interesarle: Agricultor muere de infarto en un asalto domiciliario