Ciudad del Este. Agencia Regional.

Un equipo técnico de terapia intensiva y recursos físicos del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social se encuentra en el Hospital Regional de Ciudad del Este, para la supervisión del avance de las obras de adecuación de un pabellón para la Unidad de Terapia Intensiva Pediátrica.

La medida viene como derivación de los constantes reclamos por la falta de cuidados intensivos para niños y la demanda rebasada del Hospital Los Ángeles, el único lugar donde existe una UTI Neonatal de ocho camas, con la vigencia de un convenio entre la Fundación Tesai y el Ministerio de Salud Pública.

Este servicio, de acuerdo a urgencias, suele ser utilizado para niños mayores también, hasta tanto puedan ser trasladados a otros hospitales del país, según dijo a La Nación/Nación Media, el doctor Arturo Portillo, director de la Región Sanitaria. Por su parte, el director del Hospital Regional, doctor Federico Schroder, confirmó la presencia del equipo técnico del MSP, en el pabellón donde se están haciendo las obras.

Como parte de la revisión de trabajo, igualmente está en la región sanitaria un equipo de la Dirección de Programas del MSPyBS para la vigilancia del plan anual de reducción de la morbimortalidad materna feto-neonatal, según confirmó a La Nación/Nación Media, la doctora Romina Benítez, jefa de Programas de Salud del Ministerio de Salud Pública, en la Décima Región Sanitaria de Alto Paraná.

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“Se trata de una revisión regular que realiza el MSP y se venía haciendo en forma virtual, pero ahora se hará en forma presencial”, dijo esta mañana la doctora Benítez, con respecto a la vigilancia del programa de prevención de la morbimortalidad materna.

Ante los números pedidos de camas de UTI para niños, desde la ciudadanía se empezó a cuestionar qué pasó del pabellón construido por el Consejo Local de Salud, con recursos municipales y que teóricamente fue habilitado como UTI Niños.

Ante esto, los doctores Arturo Portillo y Romina Benítez explicaron que sí fue habilitado como contingencia sanitaria durante la pandemia, pero en forma provisoria, porque el pabellón no tenía las condiciones adecuadas para el funcionamiento de una UTI Pediátrica con los requisitos exigidos por el MSP. La comuna invirtió millonarios recursos para un pabellón y compra de camas para terapia intensiva, pero el edificio no servía para tal fin.

“Se recomendó su adecuación física y una vez terminada la pandemia, se desmanteló el lugar y luego se iniciaron las obras”, dijo el doctor Portillo. Consultado qué pasó de las camas de terapia intensiva, dijo que están resguardados en un depósito.

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