Pacientes del Instituto Nacional del Cáncer (Incan) nuevamente soportan el desabastecimiento de medicamentos utilizados para las sesiones de radioterapia. Si bien los fármacos figuran en el vademécum médico, no hay en stock en la farmacia del centro asistencial.
Los familiares de los enfermos conformaron un grupo de WhatsApp para pedir ayuda a la ciudadanía. Existe un caso puntual para una mujer que requiere G. 700.000 para comprar la medicina necesaria para el tratamiento al que debe someterse este viernes 14 de julio.
Roberto Sanabria contó al canal GEN en el programa “Arriba hoy” las peripecias por las que pasan por la falta de medicinas. Específicamente se refirió a la situación de su esposa, que precisa de forma urgente un medicamento muy costoso y que solamente una farmacia está ofertando en este momento, conforme expresó. “Nos estamos rebuscando haciendo actividades, estamos recurriendo al buen corazón de amigos, conocidos y de los vecinos para llevar adelante todo este calvario”, señaló en tono apesadumbrado.
Lamentó que pacientes provenientes de localidades lejanas del país acudan al Incan esperanzados de encontrar alivio a sus dolencias, pero se encuentran con las estanterías vacías de medicamentos requeridos para el tratamiento médico. “Es triste encontrarse ante un escenario en donde tendría que haber habido solución para los enfermos aquí en el país. Y más hablando de la parte oncológica que es una enfermedad que no espera”, dijo.
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Figuran en existencia, pero no hay
Explicó que según la Asociación de Pacientes y Familiares en la lista de medicamentos básicos figuran como disponibles en stock, pero la realidad es otra. “El cisplatino acá y en lo que sería la República no hay, no existe. Lo que sí sé es que hay una farmacéutica de plaza que vende, pero a precios muy exorbitantes”, señaló. Relató que su esposa requiere 70 miligramos del citado fármaco como parte del esquema de tratamiento, y ello implicaría al menos G. 700.000, conforme indicó.
Es por ello que don Sanabria apela a la colaboración de la ciudadanía, a fin de que la paciente no interrumpa la sesión de radioterapia prevista para este viernes. “Si no tenés, no te hacés. Y qué puede acarrear eso, que también se corte la radioterapia y que vuelvas a iniciar todo el tratamiento nuevamente. Y cuánto cuesta todo eso nuevamente”, se preguntó al mencionar que el “cáncer avanza a cada segundo”.
El desesperado ciudadano facilitó su número de celular (0986-230 006) para quienes quieran colaborar con giros de dinero. Además, realizan hamburgueseadas y polladas los fines de semana y algunas rifas para juntar fondos que permitan financiar el costoso tratamiento de la paciente. “Estamos recurriendo también a la solidaridad de los amigos, con algún apoyo de dinero”, puntualizó. Dijo que en ese mismo número se reciben colaboraciones para otros pacientes, ya que conformaron un grupo de WhatsApp para hacer extensivo los beneficios para otras familias necesitadas.
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