El subcomandante de la Policía Nacional, Baldomero Jorgge Benítez, señaló este viernes que Marcio Sánchez, alias Aguacate, habría sido asesinado a causa de perder su “blindaje” como un presunto capo del tráfico de drogas y el sicariato. Su cuerpo fue encontrado en plena vía pública de la ciudad de Pedro Juan Caballero, departamento de Amambay.
“Muchas organizaciones criminales lo estaban buscando. Sin recursos financieros, sin la protección, sin el blindaje que otorga ser un gran patrón porque fue despojado de sus bienes materiales, porque había quedado totalmente desprotegido”, dijo el subcomandante en comunicación con la radio 1020 AM.
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Mencionó que el presunto jefe de sicarios llamativamente solo tenía un antecedente por tenencia ilegal de armas, donde tuvo una “leve condena” y los investigadores tuvieron muchas dificultades para abrir nuevos procesos penales en su contra, tanto por lavado de dinero como por los hechos de sicariato.
El subcomandante indicó que Marcio Sánchez de manera “informal” fue el responsable de varios hechos punibles, como los sicariatos, tráfico de drogas y lavado de dinero. También fue detenido tras el asesinato del supuesto capo narco Jorge Rafaat, pero fue desvinculado de la causa rápidamente.
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“Nosotros necesitábamos construir la base para entrar por lavado de dinero y otros crímenes, como terrorismo y narcotráfico, no teníamos cómo sustentar, pero sabíamos lo que él representaba. El caso hay que aclarar, más allá de lo que sea Marcio Sánchez, tenemos que esclarecer el caso y encontrar a los responsables”, agregó.
El supuesto jefe de sicarios fue torturado y ejecutado con 33 tiros por eslabones de la mafia de frontera y habría sido ultimado con pistolas automáticas calibre 9 milímetros. El nombre de Marcio Ariel Sánchez ganó notoriedad en el mundo delictivo cuando operaba, como uno de los hombres de confianza de Jorge Rafaat Toumani, asesinado mediante un espectacular atentado en el barrio San Gerardo de Pedro Juan Caballero.