Un vendedor de quiniela fue víctima del robo de su motocicleta frente a la capilla Virgen de Fátima de Asunción. La denuncia fue radicada por la hija del afectado ya que éste quedó en shock porque le arrebataron su medio de movilidad laboral y además aparentemente el sospechoso es su vecino.

“Yo hice la denuncia porque mi papá quedó shockeado. Sé que la moto ya no vamos a recuperar, pero por lo menos para que se le agarre al tipo”, dijo Katheryn Vargas a los medios de prensa.

Contó que acudieron a la casa del supuesto ladrón donde sus familiares manifestaron que “ya están hartos de él” por su incursión en la criminalidad. “Nos dijeron que él roba ropas, sillones, de todo, que ellos ya están hartos de él y que proceda nomás a la denuncia”, manifestó.

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La joven exteriorizó su preocupación por el auge de la delincuencia y dijo que su barrio es “zona roja” donde ni siquiera ingresan a buscar pasajeros los conductores de plataformas de viajes, por temor a ser asaltados. Lamentó que su papá haya perdido su elemento de trabajo, además quedó con la millonaria cuenta que debe seguir pagando por el biciclo.

“La moto es fundamental para su movilidad porque él es quinielero. Eran 24 cuotas y en febrero empezamos a pagar. Es penoso que ocurra esto porque es nuestro vecino (el que hurtó). Yo no le conozco personalmente al muchacho, pero a cinco cuadras de nuestra casa vive”, indicó.

Las cámaras de seguridad de la zona captaron el momento en que el delincuente lleva la moto que estaba estacionada en la vía pública y al parecer fue visto por varios vecinos, pero ninguno quiso dar su versión como testigo para colaborar con la investigación policial.

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Este lunes, desde el departamento de Investigaciones de la Policía Nacional informaron que el ataque a la vivienda del jefe de seguridad del Centro de Rehabilitación Social de Itapúa (Cereso) sería en venganza por las requisas realizadas en el pabellón del grupo criminal Primer Comando Capital (PCC).

Según el reporte policial, el ataque ocurrió el pasado sábado 21 de setiembre, y todo quedó registrado en imágenes de cámaras de seguridad. En los vídeos recogidos por los intervinientes se puede ver cuando dos personas llegaron hasta la vivienda ubicada en la ciudad de Encarnación y perpetraron el hecho.

Eran dos hombres, uno de ellos subió sobre el vallado perimetral y mira haci el interior del patio para realizar disparos, mientras el otro disparó contra el portón. Durante el atentado, que ocurrió en horas de la madrugada, resultó herida una de las mascotas de la familia que fue asistida hasta una veterinaria, pero se confirmó su fallecimiento.

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Tras el ataque, ambas personas salieron corriendo y el jefe de seguridad, Antonio Colmán, salió para ver qué estaba pasando. De inmediato llamó a la comisaría local y agentes de investigaciones, quienes pudieron levantar del sitio 16 vainillas servidas. Hoy informaron que los disparos se realizaron con armas 9 milímetros.

Los intervinientes indicaron que los disparos percutidos dieron contra el portón, el automóvil de la víctima y otros bienes materiales que estaban en patio del recinto. Así también, confirmaron el fallecimiento del gato de la familia que fue alcanzado por uno de los proyectiles.

Afirmaron que todo apunta a un caso de amedrentamiento por parte de los miembros del PCC, en cuyo pabellón se viene realizando una serie de requisas y de donde ya se logró retirar armas blancas de fabricación casera, bebidas alcohólicas, drogas, celulares y anotaciones varias.

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En plena vía pública y a escasas cuadras de la costanera de Encarnación, un hombre que caminaba en compañía de quien sería su pareja recibió un disparo, justo a la altura de la cabeza, por parte de un solitario pistolero, quien tras el hecho se dio a la fuga del lugar a pie.

La víctima fue identificada como Óscar Cantero Sosa, de 38 años de edad, quien fue rápidamente auxiliada por vecinos del lugar hasta un sanatorio privado, donde informaron que sufrió un traumatismo cráneo encefálico y que permanece en terapia intensiva con pronóstico reservado.

Según los datos ofrecidos por la Policía Nacional hasta el momento, Cantero Sosa cuenta con orden de captura emitida por Argentina, referente al tráfico de drogas, por lo que el ataque podría ser un ajuste de cuentas.

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Horas más tarde, pero ya entrada la madrugada, fue reportado un vehículo en llamas en el barrio Los Arrabales de Encarnación, que se sospecha fue utilizado posteriormente por el autor del atentado. Peritos de la Policía intentaron recuperar cualquier indicio que no pudiera borrar el fuego.

Uno de los puntos que llama poderosamente la atención de los investigadores es la osadía con la que actuó el solitario asesino, ya que el ataque se dio en una zona que cuenta con refuerzo de efectivos policiales por las actividades que se desarrollan en la costanera y además de la cobertura casi total de cámaras de seguridad.

Las imágenes de las cámaras de circuito cerrado que lograron captar el momento del ataque y huida del sujeto serán claves para ayudar a dar con el atacante y dilucidar lo ocurrido y quién podría estar detrás del hecho.

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Una pareja que lleva años tratando de tener un bebé y hasta la fecha no pudo, encontró en la puerta de su casa a un recién nacido que fue abandonado junto con una nota donde pedían que lo cuiden. “Si nosotros no le encontrábamos enseguida, esa pobre criatura iba a morir”, dijo Nancy Leiva, encargada de la iglesia donde fue encontrado el bebé.

Las autoridades buscan dar con el paradero de la madre, mientras que la pareja, que vive en el barrio Conavi Walter Insfrán, ubicada en el departamento de Caaguazú, no pudo contener la emoción al encontrar al recién nacido que fue abandonado en la puerta de una iglesia evangélica, del cual son encargados.

El pequeño estaba envuelto en una cobija y lo hallaron con una nota en la que pedían que lo cuiden. Según el reporte policial, recibieron la denuncia sobre el hallazgo del bebé durante la noche de ayer miércoles, por parte los encargados de una iglesia que se encuentra dentro del asentamiento San Salvador. El recién nacido fue dejado en la puerta trasera del sitio y encontrado por un hombre, identificado como Ezequiel Bobadilla.

Esta persona indicó a los intervinientes que estaba haciendo una transmisión en vivo por redes sociales, predicando para sus seguidores y cuando cortó en enlace, cerca de las 21:00, fue al baño que queda en la parte trasera de la iglesia. En ese momento vio que una persona saltó la muralla que da hacia la calle.

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Tras esta situación, pensó que era un delincuente que entró a robar y fue a ver si faltaba alguna de sus gallinas. Grande fue su sorpresa al encontrar al bebé en la puerta. Enseguida, llamó a su esposa, quien dio aviso a la subcomisaría 54 del barrio Constitución, cuyos oficiales llegaron al sitio y llevaron al recién nacido hasta un centro asistencial.

Junto con el pequeño encontraron una nota que decía: “¡Cuídenla por favor! No le digan a nadie, yo sé que ustedes la querrán. Yo no podré cuidarla porque tengo muchos ya (hijos). No le diré nada a nadie, ni ustedes, por favor”. El escrito fue firmado por la aparente madre biológica.

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